Entre las hipótesis del fallecimiento que barajan fuentes de la investigación destaca la caída del hombre desde una escarpada pendiente, por el traumatismo que el cadáver presentaba en la cabeza. El vecino, de 54 años de edad, era un gran amante de esta zona y conocedor del entorno, por su afición de recoger setas y espárragos en las faldas de la sierra kárstica. Precisamente, el hombre acudió a esta zona el pasado miércoles para para recoger tubérculos, según informaron miembros de su familia, quienes dieron el aviso de su desaparición hacia las dos de la madrugada del jueves, ante la prolongada ausencia de A. V. S. G, quien deja mujer y varios hijos. El ya fallecido llegó al entorno de El Torcal al mediodía del miércoles, y dejó su vehículo junto a los repetidores de la zona.
Tras el aviso de su desaparición se activó un dispositivo de búsqueda nocturno, al que se unieron dos helicópteros el jueves por la mañana, pertenecientes a los grupos de rescate de la Guardia Civil y de la Junta de Andalucía.
“No me lo creo. No me creo que sea él hasta que no lo vea con mis propios ojos”, lamentaba uno de los ocho hermanos del fallecido, que se acercó al lugar de los hechos junto a más hermanos, sobrinos, y amigos del vecino antequerano.
La base de la cuadrilla de rescate se instaló en el campo de fútbol del Nacimiento de La Villa, desde donde los aparatos voladores realizaron varias maniobras de despegue y aterrizaje por lo dificultoso que resultó rescatar el cuerpo, que se encontraba yaciendo junto a una pendiente inaccesible y muy escarpada.
Una vez que el cuerpo fue depositado en la camilla del helicóptero, el aparato aterrizó en el helipuerto del hospital de Antequera. Desde allí, el cadáver fue trasladado a Málaga para la realización de la autopsia.
La treintena de personas que integraron el dispositivo de búsqueda accedieron al lugar en el que se encontraba el cuerpo desde la zona alta de El Torcal, ya que el descenso por la sierra resultaba “más operativo” para llegar hasta el cadáver. Al lugar de los hechos acudió la concejala Lola García, en representación del alcalde, Ricardo Millán, que en esos momentos se encontraba fuera de la ciudad. “Acudimos para mostrar nuestro apoyo a los familiares y todos los medios profesionales que necesiten”, dijo la edil.
