El pregón de la Navidad que este año cumplía 25 años desde que la Real Academia de San Romualdo de Ciencias, Letras y Artes organiza en colaboración con el Ayuntamiento -hasta el punto de que es el pregón oficial de la ciudad- suele constar de un pregón propiamente dicho y un concierto posterior.
Cuando el pregón lo pronuncia José Carlos Fernández Moreno, que además de haber sido presidente de la Institución durante varios mandatos ingresó en ella precisamente hace un cuarto de siglo, por lo que ha colaborado en todas las ediciones, las cosas pueden cambiar.
Fernández Moreno entró con la Orquesta Tararea, Laboratorio Musical, de Córdoba, sobre el escenario y con el director de la misma, el isleño, académico y por supuesto, músico, Manuel Pérez, también en el escenario, lo que a todas luces no es habitual.
El pregón fue, con estos mimbres, interactivo pregonero-orquesta y además con tres mujeres de letras y de artes que desde el patio de butacas y ante el belén instalado en una esquina del proscenio, leyeron las rogativas al Niño Dios.
Fernández Moreno habló de la Navidad, de cómo debe de ser y de cómo no es; de como fue antes y de cómo es ahora y habló de cristianos y de no cristianos. O con más exactitud, de lo que es cristiano y de lo que no es cristiano. Nunca mejor dicho hablando de José Carlos Fernández, a Dios rogando y con el mazo dando.
Luego, una vez finalizado el pregón que en este caso es el único que lo ha pronunciado dos veces -también ha pregonado dos veces la Semana Santa- el presidente de la Real Academia de San Romualdo, José Enrique de Benito Dorronzoro y la alcaldesa de San Fernando, Patricia Cavada, subieron al escenario para agradecer a Fernández Moreno el pregón, en el prmero de los casos y para agradecer a la Acaddemia su organización, en el segundo.
La alcaldesa, además, le entregó un obsequio a José Carlos Fernández “elegido por mí, personalmente” que sin duda alguna sorprendió y gustó al pregonero, dada la cara de sincera sorpresa al tener en sus manos un belén completo exquisitamente realizado y terminado.
Luego sí. Llegó el concierto de Navidad a cargo de la Orquesta Tararea. Laboratorio Musical de Córdoba, dirigida por Manuel Pérez y contando con la colaboración de las sopranos María José Fernández y María Auxiliadora Belmonte.
El Real Teatro de las Cortes estaba engalanado para la ocasión y hasta en el último detalle estuvo la mano -rondando el suspense- de José Carlos Fernández Moreno. Como no podía ser de otra forma.
