La llegada de inmigrantes a Málaga descendió un 48%, con 2.960 hasta este momento frente a los 5.679 derivados a la ciudad en la misma fecha de 2018, según datos aportados ayer por la Subdelegación del Gobierno. Esto no impide, sin embargo, que el Gobierno nacional hayta anunciado la puesta en marcha de un protocolo pionero para gestionar el rescate, llegada y atención a migrantes, documento que incluye todos los pasos que se dan desde el auxilio en el mar de estas personas trasladadas al puerto de la capital hasta su acogida y derivación final.
El protocolo ha sido expuesto en el Comité de Coordinación de Migración a los representantes de las administraciones públicas y entidades que participan en la gestión de los flujos migratorios en una reunión con mandos de la Guardia Civil y Policía Nacional, además de Salvamento Marítimo, Capitanía Marítima, Comandancia Naval y Sanidad Exterior. También han estado representados el Puerto y el Ayuntamiento, el Colegio de Abogados y Cruz Roja, junto al Servicio de Emergencias 112, el de Protección de Menores y el SAS.
“Tanto la reunión como el protocolo persiguen una puesta en común de los procedimientos utilizados por todos los agentes que actúan en la gestión migratoria”, resaltó Gámez, quien subrayó el carácter pionero de este documento porque “nunca hasta ahora se había concretado ni plasmado” la intervención de estos organismos ni de las administraciones públicas. El objetivo es “dar uniformidad y ahondar en la coordinación” de todas las partes y actores implicados en la atención a los migrantes, ha puntualizado.
El protocolo, elaborado por la responsable de la Dependencia de Trabajo e Inmigración de la Subdelegación de Málaga, Marta Izquierdo, se centra en los pasos desde la activación de una alerta por detección de una embarcación en el mar; el rescate de las personas que han sido localizadas; el tratamiento a bordo del buque de salvamento; y su traslado hasta el puerto de Málaga, donde reciben la primera atención humanitaria y sanitaria. Una vez que los migrantes reciben esa primera atención, comienza el proceso para su identificación bajo custodia policial.
Málaga dispone desde finales de agosto de un Centro de Acogida Temporal de Extranjeros (CATE), donde se procede a esa identificación y se ofrece asistencia letrada, y de un Centro de Atención, Estabilización y Derivación (CAED), dependencias de segunda acogida y estancia temporal donde reciben asistencia psicológica, social y jurídica hasta que se organiza su destino final. La subdelegada resaltó la instalación desde marzo del Centro de Coordinación de Operaciones del Estrecho y su labor en la lucha contra la inmigración irregular.
Tras el aumento registrado en 2018, la llegada de migrantes a las costas malagueñas descendió un 48% en 2019. Hasta este momento, un total de 2.960 personas han sido trasladadas al puerto o han llegado al litoral de la provincia, frente a los 5.679 migrantes que fueron derivados a Málaga en la misma fecha de 2018.
