Comienza la anual inquietante cuenta atrás del Xerez CD

Cuando el pasado 6 de junio el miembro de Afición Xerecista, Adolfo Sánchez, declaraba en la Ser que en una semana se iba a pagar parecía que la tranquilidad se iba a instalar esta pretemporada en el Xerez CD. Posteriormente el propio club matizaba dichas declaraciones e indicaba que se pagaría como se pagaba habitualmente, es decir en los plazos finales que dictan que el día 23 de agosto el equipo debe tener desbloqueado los derechos federativos para poder tramitar las fichas de jugadores, técnicos y auxiliares.
Así pues comienza la inquietante cuenta atrás de todos los años, aunque en esta ocasión con un problema añadido y es que la planificación deportiva está en el kilómetro cero. No hay nada hecho. Más bien deshecho. Solo un jugador, Dani Jurado, y a la espera de lo que suceda con el contencioso de Sergio Narváez en el que AFE tendrá la última palabra tal y como anticipábamos en nuestra pasada edición.  
 Mucho que pagar, ya que solo en la liquidación de entrenadores del pasado ejercicio hay que poner en torno a los 20.000 euros; hay que finiquitar a jugadores como Salas, Pedro Carrión, José Vega o Juan Benítez  que fueron dados de baja de forma unilateral, hay que pagar a Ruz y lo que resta de abonar a Toni Lechuga, hay que satisfacer unos veinte mil euros pendientes con el organismo federativo y hay que alcanzar acuerdos con profesionales que pueden seguir pero a los que igualmente se les adeudan cantidades. Los 50.000 euros de los que se habló en su momento parece que se han incrementado y se puede estar hablando de una suma importante de dinero que, obviamente, hay que añadir a un presupuesto con partidas como desplazamientos, arbitrajes, campos y compensaciones a jugadores y nómina de cuadro técnico.
Como se ve hay mucho que hacer y quedan cuarenta y siete días para que todo quede total y absolutamente desbloqueado. Desde el club se transmitió en su momento que el equipo va a competir y se sigue enviando el mismo mensaje de tranquilidad a una afición que está a la expectativa.