El Museo Íbero de Jaén acoge hasta el 15 de enero la exposición ‘100 años de arqueología de un monumento: la Cámara de Tugia’, dedicada a la historia de la Cámara Sepulcral de Toya de Peal de Becerro y que se proyecta como itinerante.
La muestra está enmarcada en los actos organizados con motivo de la declaración de este enclave arqueológico como Monumento Histórico Artístico (1918-2018), y evidencia su relevancia, al ser uno de los mejores ejemplos conocidos sobre la arquitectura funeraria íbera.
“La exposición recala en un sitio emblemático, el Museo Íbero de Jaén, en una fecha muy significativa, a escasos días del primer aniversario de la apertura de este espacio”, dijo la delegada del Gobierno, Ana Cobo.
Igualmente, reconció que el descubrimiento de la Cámara de Toya, y su posterior declaración, significó “la identificación, por primera vez, de la provincia de Jaén con los pueblos íberos, y su legado patrimonial”. La cámara sepulcral está datada a principios del siglo IV antes de nuestra era y acogió el enterramiento de un personaje regio junto a otras personas vinculadas a su figura, que fueron enterradas con posterioridad, tal y como lo demuestra la amplia cronología de los ajuares que se han encontrado.