Catalina Vásquez andaba buscando un taller de arte en Torremolinos, pero la búsqueda no daba frutos. La casualidad llamó a las puertas de la familia al descubrir que un conocido tenía libre varios locales en la plaza de la Independencia, en pleno centro de la localidad. “Como ya había encontrado un espacio para mí, pensé que sería útil para los que buscaban lo mismo que yo”, explica Catalina. Con esta idea abrió sus puertas el pasado 8 de enero la Asociación Cultural El Calvario.
Este espacio creativo, abierto a creadores, creativos, artistas y amantes de la cultura, ofrece talleres de grabado, pintura, fotografía y arte digital, teatro o yoga, entre otras disciplinas.
Esta gran, pero joven historia, se fue fraguando con la máxima organización. “Una vez que ya teníamos el espacio asegurado, abrimos convocatoria para aquellos que quisiesen venir a trabajar como artistas, impartir talleres y clases de alguna materia relacionada con el arte o la cultura en general. Así se empezó a formar, poco a poco, el equipo que saca adelante este proyecto, que actualmente está formado por los cuatro profesores que pasan más tiempo aquí”, explican Vásquez y Nuria de la Iglesia, asesora del proyecto.
Las actividades culturales no entienden de sexo, horario o edad, sin embargo, actualmente se benefician de ellas los más pequeños y más mayores, “aquellos que disfrutan de mayor tiempo libre”, comentan, entre risas. En cuanto a su horario, este espacio creativo no descansa. “Estamos abiertos de lunes a sábado, aunque queremos hacer también actividades los domingos. Por la noche tampoco descansamos, ya que ofrecemos música en directo y teatro”, explican.
No son los únicos que tienen una amplia oferta de talleres culturales, ya que el Centro Cultural Pablo Ruiz Picasso, dependiente del Ayuntamiento, también lo hace. Sin embargo, se trata de una oferta cerrada y estática. “Nos hemos dado cuenta de que hay mucha gente que sabe y que quiere mostrárselo a los demás. A la gente no le gusta tanto recibir una oferta impuesta, cerrada, querrían aprender sobre más temas. También es verdad que un gran problema que vemos es que les cuesta buscar aquellos que quieren”, detallan.
Pero no es el único problema que detectan en los vecinos a la hora de buscar actividades culturales. “Hace falta educación cultural; que la gente aprenda que ese profesor que te imparte un taller o esa compañía de teatro con la que acabas de disfrutar, tienen que comer”. Planes a corto plazo Las mentes creativas no descansan.
Por ello, desde la Asociación Cultural El Calvario ya tienen dos planes en mente: una revista en la que el contenido esté definido por los propios vecinos del municipio, así como el I Premio Torremolinos en Breve, abierto a mayores y jóvenes hasta el mes de julio. “Queda un largo camino para que la gente se dé cuenta de que Torremolinos no es solo fiesta y vida nocturna”. El camino ha comenzado.
