El concejal delegado de Nuevas Tecnologías, David Ramos, ha participado hoy, jueves, en Cádiz en un encuentro para fomentar el “desarrollo inteligente” en Andalucía. Políticos y técnicos de distintas administraciones han aportado ideas para la creación en la región de una red de “smart cities”, o ciudades inteligentes, en las que la tecnología se aplique a la gestión eficiente de los distintos servicios y a la preservación del medio ambiente.
David Ramos, que ha asistido a esta jornada junto al responsable técnico del Centro de Proceso de Datos (CPD) del Ayuntamiento, ha señalado que “el concepto de 'smart city' significa aprovechar los avances en las telecomunicaciones electrónicas para gestionar de una manera más eficiente todos los servicios que se puedan prestar al ciudadano. Por lo tanto, engloba desde optimizar la intensidad y los horarios del alumbrado público para ahorrar energía, hasta coordinar la flota de autobuses urbanos para aumentar su puntualidad, por poner solo dos ejemplos”.
“En San Roque -continuó- llevamos un tiempo trabajando en este aspecto, y ya el pasado otoño una consultora comenzó un estudio para convertirnos en una 'smart city', centrándonos en el desarrollo sostenible, en fomentar la calidad de vida de los ciudadanos, en lograr más eficacia en los recursos y en potenciar la participación activa de la ciudadanía. En resumen, queremos elaborar un proyecto que englobe todo esto para aplicarlo en futuras licitaciones y contrataciones que se vayan a realizar desde el Ayuntamiento”.
“Es importante -añadió Ramos- asistir a encuentros como el de hoy en Cádiz para comprender mejor todas las posibilidades que ofrecen las 'smart cities' y también para aprender de la experiencia de otras administraciones, para así aprovechar sus aciertos y no caer en sus errores. Quisiera agradecer a la Junta de Andalucía y a la Diputación de Cádiz por la organización de esta jornada, que se financian con fondos europeos, y también a todos los expertos que han ofrecido su visión del asunto, porque ha sido muy constructiva”.
La jornada “Retos y oportunidades para las administraciones locales ante el desarrollo inteligente de Andalucía” se han convocado como una sesioÌn introductoria de alto nivel para concienciar a los responsables municipales sobre las oportunidades que ofrece el concepto de las ciudades y territorios inteligentes aplicadas al aÌmbito municipal y al aÌmbito provincial. También han servido para recoger inquietudes de las entidades locales presentes para coordinar actuaciones a nivel provincial sobre aspectos relacionados con las 'smart regions'. Por último, se pretendía involucrar a todos los actores del ecosistema smart y coordinar las distintas acciones en la materia a nivel provincial.
Han participado expertos del Plan Nacional de Ciudades Inteligentes del Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital; del Plan AndalucíaSmart 2020, de la Consejería de Innovación de la Junta de Andalucía; de la Universidad de Cádiz; de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias; de la Diputación de Cádiz; y de distintos ayuntamientos gaditanos.
El concepto de Smart City no solo se centra en los nuevos proyectos de crecimiento urbano, sino que se dirige también a la adecuación de las actuales ciudades en ciudades inteligentes.
Empresas, instituciones y expertos coinciden en que Smart City o ciudad inteligente son aquellas ciudades que apuestan por mejorar la vida de sus habitantes y, a la vez, por la sostenibilidad. El propósito final de una Smart City es alcanzar una gestión eficiente en todas las áreas de la ciudad (urbanismo, infraestructuras, transporte, servicios, educación, sanidad, seguridad pública, energía, etcétera), satisfaciendo a la vez las necesidades de la urbe y de sus ciudadanos.
Se trata, en definitiva, de encontrar el equilibrio entre el bienestar de los ciudadanos y la preservación del entorno.
Una ciudad inteligente es aquella que apuesta por sistemas eficientes aplicados a sus infraestructuras. La innovación tecnológica es la clave para desarrollar proyectos que permitan optimizar la distribución de energía, gestionar los residuos de manera más limpia, reducir el consumo de los hogares, organizar mejor la circulación de los vehículos… En definitiva, este tipo de iniciativas se aplican sobre cualquier aspecto que influye en la organización de un núcleo urbano.
Algunos ejemplos que puede percibir el ciudadano de proyectos Smart City son las tecnologías que mejoran el flujo del tráfico, el alumbrado eficiente mediante energía solar, o la construcción de viviendas equipadas con sistemas que permiten ahorrar en calefacción o refrigeración.
