El entorno urbano de Torre Sevilla, el edificio de 40 plantas construido en el sector sur de la Cartuja, será nuevamente sometido a obras para acometer la profunda "reordenación" planeada para las paradas de autobuses de toda la zona. En concreto, las paradas del Consorcio Metropolitano de Transportes serán reubicadas en una única dársena a instalar en la gran isleta triangular existente frente a la torre, mientras las paradas de los autobuses urbanos serán acercadas precisamente a este nuevo "nodo de transporte" colectivo.
El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, y el director territorial de Caixabank en Andalucía Occidental, Rafael Herrador, han comparecido este viernes junto al director general de Movilidad del Consistorio hispalense, José Lorenzo, para informar del comienzo del proyecto promovido para reordenar por completo las paradas de transporte público del entorno de la torre de 178 metros de altura que corona el espacio urbano de Puerto Triana.
Según han recordado, se trata de uno de los aspectos ya planeados en el paquete de medidas destinadas a mejorar la movilidad en el entorno de esta torre propiedad de Caixabank. La torre, recordémoslo, cuenta con un aparcamiento subterráneo, un espacio cultural Caixafórum a escasos metros y un edificio podio, en el que se espera la entrada en funcionamiento de un nuevo centro comercial.
En el marco de estas medidas, por cierto, a finales de 2015 entraba ya en servicio una nueva ordenación de la gran intersección que se extiende frente a la torre y que separa la zona norte de Triana, del sector sur de la Cartuja. Mediante dicha reordenación del circuito de circulación, el tráfico de entrada a Sevilla desde la avenida de la Expo '92 contaba así con giro directo a la izquierda para acceder a la Cartuja con mayor facilidad.
NUEVAS OBRAS
Ahora, y de nuevo con cargo a Caixabank, van a comenzar los trabajos relativos a la anunciada reordenación del conjunto de paradas de autobuses ubicadas en el entorno de la torre, donde confluyen 21 líneas del Consorcio Metropolitano de Transportes del Área de Sevilla, encabezado por la Junta de Andalucía, y seis líneas de la empresa Transportes Urbanos de Sevilla (Tussam), perteneciente al Ayuntamiento hispalense.
Como se ha explicado durante la presentación del proyecto, la idea es seguir las pautas marcadas por el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 2006 y habilitar en esta zona todo un "nodo de transporte metropolitano" en el que se fomente además la intermodalidad.
Así, las paradas de autobuses con la que cuenta en la zona el Consorcio Metropolitano de Transportes serán reubicadas en un único espacio. En concreto, se tratará de una "dársena" o andén de unos 60 metros de longitud que será instalada aprovechando la gran isleta triangular de la intersección que se expande ante la Torre Sevilla. La actuación, además, contempla la instalación de elementos de sombra y más vegetación junto a este "nodo de transportes", así como la adecuación de los necesarios pasos de peatones para mejorar los accesos y salidas a pie.
En paralelo, las paradas con las que cuenta en la zona la empresa municipal Tussam serán reubicadas, para "acercarlas todo lo posible" a la citada dársena del Consorcio Metropolitano de Transportes y así "fomentar la intermodalidad" entre el transporte urbano y el metropolitano. En concreto, está medida afectará a paradas de las líneas cinco, seis, 43, las dos circulares y la línea Tussam Exprés.
Este primer proyecto estará acompañado de una segunda obra, destinada a reurbanizar el recorrido comprendido entre la torre y el puente del Cristo de la Expiración, mejorando la circulación de peatones y ciclistas y dotando al trayecto de "sombra y calidad paisajística".
TODA UNA "TRANSFORMACIÓN URBANÍSTICA"
Mediante estas actuaciones, según Juan Espadas, va llegando a su fin la gran "transformación urbanística" acometida en el entorno de Puerto Triana, con motivo de la construcción de la torre y la creación de toda una nueva "manzana de oro" llena de "atractivos culturales y comerciales". Y es que además de la torre, con sus oficinas y su estacionamiento subterráneo, el entorno cuenta con el espacio cultural Caixafórum y el futuro centro comercial, y está ubicado muy cerca del Pabellón de la Navegación y del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo.
Además, este entorno espera la apertura del nuevo parque de Fernando de Magallanes, creado entre la torre y el cauce del río Guadalquivir en una zona que aún albergaba vestigios de la exposición universal celebrada en Sevilla en 1992. Esta "transformación" de la zona ha supuesto ya unos seis millones de euros aportados por Caixabank, cuatro de ellos sólo al nuevo parque de Fernando de Magallanes, toda vez que las nuevas medidas anunciadas en materia de movilidad supondrán una inversión adicional de unos 900.000 euros, también por parte del banco.
Las nuevas obras, en cualquier caso, se prolongarán durante unos tres meses, con lo que la idea es que Sevilla arranque el año 2018 con estas nuevas medidas de movilidad en el entorno de la torre y la apertura del parque de Fernando de Magallanes. En cuanto al centro comercial, según ha indicado el alcalde, las previsiones es que sus obras concluyan "no antes de primavera".