El expresidente de la Generalitat de Cataluña y líder del PDeCat, Artur Mas, ha instado al Gobierno del PP a hacer una oferta de autogobierno a Cataluña para someterla a referéndum junto a la posibilidad de independencia. Además, ha advertido de "la reacción de orgullo" que puede haber de los catalanes ante las medidas que el Ejecutivo tome para evitar la consulta soberanista y que puede "dejarle en una situación peor de la que tiene en este momento".
Mas ha ofrecido una conferencia este miércoles en el Kursaal de San Sebastián sobre el derecho a decidir, en la que también ha intervenido el exlehendakari, Juan José Ibarretxe y que ha sido organizada de forma conjunta por la plataforma Gure Esku Dago y por 'Agirre Lehendakaria Center'. A la cita han acudido representantes del PNV como Joseba Egibar o el diputado general de Guipúzcoa, Markel Olano; de Sortu como Arnaldo Otegi o Arkaitz Rodríguez; de EH Bildu, así como la magistrada Garbiñe Biurrun o el portavoz del PdeCat Francesc Homs, entre otros.
El que fuera el máximo representante del Gobierno catalán ha destacado que el surgido en Cataluña es "un movimiento que nace de la base del pueblo, un movimiento pacífico, cívico e integrador, y un movimiento de pulcritud democrática que apuesta por la legalidad".
En este sentido, ha señalado que se trata de "un proceso que tiene como claves 'urnas y Ley', que empieza en las urnas y va a terminar en las urnas". "El Estado español nos está agrediendo en forma de reconquista competencial", ha aseverado, para apuntar que "se está politizando descaradamente la Justicia" y se está "judicializando la política".
Además, ha señalado que se desarrolla "una guerra sucia" impulsada por los estamentos del Estado que, "por vías ilegales, intentan desprestigiar a los dirigentes soberanistas catalanes". "Estamos reaccionando ante una agresión muy grande en legítima defensa", ha añadido.
Artur Mas ha asegurado que, después de muchos "intentos fallidos de pactar con el Estado", a los catalanes solo les queda el camino de lograr "un Estado catalán en Europa". "Queremos construir la Dinamarca mediterránea", ha subrayado, para advertir de que, para ello, "costará como mínimo una generación".
En su opinión, esto se puede conseguir, y ha dicho que "la primera clave del éxito es ejercer el derecho a decidir" porque se habrá ganado, "en parte, esa batalla". "Votar ya es ganar", ha indicado, para afirmar que este mismo año se celebrará "un nuevo referéndum" en Cataluña.
Por ello, ha llamado a la "unidad política y movilización de la gente", que es un "binomio fundamental" y una de sus "mejores cartas en esta partida". Asimismo, ha señalado que "la tercera clave del éxito" será "la mayoría social en las urnas" y ha asegurado que aceptarán lo que decidan los catalanes, sea a favor o en contra de la independencia.
"No sabemos si tenemos la mayoría suficiente para crear un estado catalán. Sabemos que estamos cerca", ha manifestado. Además, ha indicado que la "cuarta clave del éxito es el reconocimiento internacional, aunque sea progresivo".
PASOS A DAR
Mas ha explicado los pasos que se darán ahora en Cataluña y ha afirmado que seguirán en 2017 los juicios contra representantes soberanistas. "El Estado, como mínimo, va a hacer eso, y seguramente no se va a quedar ahí. Ya se oye hablar de precintar escuelas, de recuperar competencias y de aplicar el artículo 155 de la Constitución (que prevé la suspensión de la autonomía)", ha señalado.
Tras apuntar que se desconoce "cuál va a ser la reacción del Estado", ha afirmado que "es evidente que no se va a quedar de brazos cruzados". "Cuantos más juicios haya, cuantos más líderes soberanistas catalanes pasen por un Juzgado, mayor será la base a favor de la independencia", ha indicado.
En este contexto, ha dicho que "ellos piensan que van a ser amedrentar a la gente en Cataluña y meterles el miedo en el cuerpo, pero se pueden encontrar con la reacción exactamente contraria, con que haya una reacción de orgullo y apuesta democrática fuerte que tuerza las previsiones del Gobierno español y que les deje en una situación peor de la que tienen en este momento".
El expresident ha explicado que, "de aquí a septiembre", el Parlamento catalán aprobará "algunas leyes, que van a ser inmediatamente recurridas, pero que darán cobertura legal y legitimidad catalana a la convocatoria del referéndum y a la sustitución de una soberanía (la catalana) por la otra (la española)".
"Va a haber un alto grado de tensión con el Estado español, si antes no se ha encontrado una solución de posible acuerdo que yo veo más lejos que la cima del Everest", ha manifestado.
En su opinión, el tercer paso será la convocatoria del referéndum, "y ahí el grado de tensión todavía puede ser mayor". "Pero, para nosotros, llegar hasta el final es fundamental porque la alternativa de no seguir adelante, sabiendo que no encontraremos un interlocutor dispuesto a escuchar, que es lo que quisiéramos, sería tirar la toalla, y no hemos hecho todo que hemos hecho para, en el último momento, tirar la toalla", ha asegurado.
En cuanto a las "claves del éxito" del proceso soberanista, ha apuntado el "ejercer el derecho a decidir". "Solamente votando ya hemos ganado en parte la batalla", ha indicado. También ha apelado "al binomio unidad política y movilización", a "mantener la cohesión social", así como "al reconocimiento internacional" y el "apoyo en las urnas".
Artur Mas ha afirmado que los catalanes "rotundamente" no renunciarían a la celebración de un referéndum, si el Ejecutivo del PP ofreciera más competencias a Cataluña como una Hacienda propia.
"Sería bueno que el Estado español pusiera encima de la mesa una oferta de autogobierno para Cataluña, pero las dos condiciones que pondríamos sería que hay que votarla en referéndum, pero al lado de una pregunta que permita votar a favor de la independencia de Cataluña y, entonces, que la gente de Cataluña escoja o independencia u oferta del Estado español sobre el autogobierno. En esas condiciones sí", ha concluido.
IBARRETXE
Por su parte, Ibarretxe ha señalado que no puede hablarse de unilateralidad en los pasos que está dando Cataluña, "uno de esos conceptos podridos que se han inventado", porque no existe tal "si la otra parte no se sienta a la mesa".
Además, ha asegurado que el pueblo vasco "estará siempre" con el catalán, al tiempo que ha defendido que el derecho a decidir sirve "para unir, no para la secesión" y las consultas se convocan "para ejercer la democracia" y "no para romper".
Además, ha defendido que "el cambio está aquí" y si el derecho a decidir "encalla, será porque ha encallado en Euskadi o Catalunya, no porque haya encallado en Madrid", al tiempo que ha abogado por construir "juntos" ese camino y ha incidido en que en 2030 Euskadi estará entre los "nuevos actores" de la sociedad globalizada, junto a Quebec, Escocia o Flandes.