Esta semana, la Junta de Andalucía ha informado que se ha adjudicado el contrato para la redacción del proyecto constructivo y asistencia técnica a la dirección de obra del traslado de la terminal marítima de El Puerto al edificio de Pescadería, según se ha dado cuenta en el último consejo de administración del Consorcio de Transportes Bahía de Cádiz.
Recordar que la delegada territorial de Fomento y Vivienda, Gema Araujo, y el alcalde, David de la Encina, firmaron este año el convenio de dicho traslado de la estación del Consorcio al edificio de la antigua Pescadería, en la margen derecha del río Guadalete.
Una decisión, una nueva obra, que no ha sentado excesivamente bien al sector turístico y sobre todo a los comercios o negocios que se encuentran en el radio de los alrededores de la actual estación marítima. Porque la incesante llegada o la salida de turistas a esta zona de la ciudad provoca que “se paren en nuestros negocios y consuman, aunque sea porque el lugar al que van les coge de paso o no es la hora exacta para marcharse. Sea como fuere, conseguimos que algunos, muchos, lleguen y consuman, que es lo que queremos y necesitamos para poder continuar”, explica el responsable de un negocio, porque “se trata de una nueva obra que, tarde lo que tarde, solo pone trabas a las ganas de los turistas de venir”.
Otros incluso han apostado por esta zona de la ciudad precisamente porque entienden que la ubicación de la estación marítima y el atraque del catamarán es una oportunidad para poder atraer a los clientes, por lo menos a los turistas y a aquellos que toman este medio de transporte, pero consideran que las obras pueden ser “perjudiciales, porque nos restarán clientes, ya que siempre son molestas”.
A raíz de este asunto, Araujo indica que “esto supone un paso más para que se materialice este traslado y los ciudadanos puedan disfrutar de las instalaciones”. También informa que “tras la entrega de este proyecto se sometería a licitación la ejecución de las obras, que están previstas para 2017”. Por su parte, el edil de Movilidad, Ángel M. González, señala “la importancia de esta actuación”, haciendo hincapié en “la colaboración y el buen entendimiento que mantenemos con la Delegación de Fomento y Vivienda y con el Consorcio de Transportes, una sintonía fundamental para que este tipo de actuaciones, tan necesarias para nuestra ciudad, vean la luz pronto”.
Pero los afectados no están de acuerdo con esta suposición, pues consideran que cambiar el lugar de la estación marítima es un error que perjudicará al sector comercial, al que se están “cargando con tantas tasas, impuestos, complicaciones en las licencias, y estas decisiones tan equivocadas. ¿No podían haber pensado hacer una estación marítima a la altura de las circunstancias cuando se puso en marcha el servicio?”, se preguntan.
Mercado gastronómico
Cabe recordar que esta zona y el edificio que otrora fuera un espacio de ocio nocturno conocido como Pescadería recibió una oferta de una empresa con sede en Sevilla para convertirse en un mercado gastronómico, un proyecto que estuvo trabajando durante meses el anterior equipo de Gobierno pero que, en su recta final, se quedó totalmente paralizado y no se retomó con el nuevo equipo de Gobierno, formado por PSOE e IU. Un proyecto que incluía apostar por integrar al comercio aledaño, para que no se sintiera fuera de esta idea, con el objetivo de que todos los participantes pudieran beneficiarse de un modelo de negocio que funciona en otras ciudades y que podía suponer un revulsivo para el turismo.
Un proyecto el del mercado que se debería recuperar, según los hosteleros y comerciantes, aprovechando que se tienen que hacer las obras de adecuación del edificio, que por el momento entienden como molestas e incómodas. Pero que se haga “de una vez por todas algo con este edificio y que no tengamos que sufrir más obras, que castigan a nuestros negocios”. Por ello piden al Gobierno actual que ponga empeño en esta tarea y que se trabaje para que El Puerto se iguale a otras ciudades que ya cuentan con un mercado gastronómico que concentra mucha atención turística.
A través de este convenio, como informa la Junta, se ha puesto a disposición del servicio de catamaranes, un local de 423 metros cuadrados en el edificio de Pescadería, adyacente a la actual terminal de pasajeros, ubicada en instalaciones modulares. El proyecto previsto contempla una mejora tanto en lo que se refiere al aspecto como a la funcionalidad, incluyendo vestíbulo, sala de espera, zona de venta de billetes y atención al viajero, oficinas del operador, taller y oficina, aseos y almacén.
