Las catas arqueológicas en la Puerta del León del Real Alcázar de Sevilla comienzan este miércoles con el objetivo de datar con precisión la puerta de Pedro I y su entorno, como la puerta islámica y otros elementos que se encuentran ocultos, cumpliendo así las premisas de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico de la Delegación Territorial de Educación, Cultura y de Deporte de la Junta andaluza para abordar la viabilidad del proyecto previsto en la actual entrada de los turistas de este Patrimonio de la Humanidad.
Según han informado fuentes municipales a Europa Press, este miércoles comienzan estos trabajos, que se prevé que se alarguen durante unas dos semanas y que cuentan con un presupuesto de unos 7.000 euros. Esta entrada del Alcázar permanecerá abierta al público en el transcurso de las obras, ya que éstas se desarrollarán a primera hora de la mañana, antes de que comiencen a llegar los visitantes, y a última hora de la jornada, cuando se marchen.
A su termino, los resultados de estas catas, en las que se empleará carbono 14, serán remitidos a Patrimonio, quien decidirá sobre la permanencia o no de estos elementos de principios del siglo XIX y que fueron alterados en el XX.
El proyecto para este espacio apuesta por retirar elementos muy alterados en el último siglo para recuperar la puerta primitiva de Pedro I, que ahora está completamente oculta, además del hueco de la antigua puerta islámica, que se puede ver desde la calle Miguel de Mañara. También, permitiría mejorar el acceso de turistas y adaptar la visita, trasladando al interior del edificio las amplias colas que se forman a la entrada del Alcázar.
Los trabajos se desarrollarán en la Puerta del León y consistirán en la eliminación controlada arqueológicamente del revestimiento interior de la Puerta del León en la estancia interior contigua a la puerta, en sus frentes norte, este y sur; así como en los tramos de escalera que afectan a dicho muro.
También, se eliminará controlado arqueológicamente el revestimiento del resalte de la muralla islámica sita en el lateral occidental del Patio del León junto a la estancia de las taquillas y un metro cuadrado de muestreo tanto en el muro de separación entre el área de las taquillas-tienda como en el Patio del León; en el patio lateral interior, en la pared de la tienda y en la estancia superior de la entrada, en la ventana central.
En este marco, cabe señalar que en mayo la citada Comisión de Patrimonio emitió un informe sobre el proyecto básico de intervención en la Puerta del León en el que se condicionaba la aprobación a la realización de "una investigación arqueológica detallada de las construcciones que pretende demoler". Para ello, la Junta pedía realizar una intervención arqueológica "puntual" consistente en el análisis de las estructuras emergentes de dichas construcciones, con objeto de que "en base a sus resultados se puedan adoptar las correspondientes decisiones sobre su posible demolición o conservación".
EL PROYECTO COMPLETO
El proyecto básico plantea la recuperación del carácter público del Patio del León como espacio de intercambio entre la ciudad y el Alcázar, un lugar de recibimiento y acogida de sevillanos y turistas, con acceso libre y previo a la entrada de visitantes al complejo y que, de manera puntual, también podría convertirse en escenario para actividades complementarias.
Se ha valorado la potente escenografía que construyen puertas, torres y murallas medievales y se han analizado las actuales edificaciones de servicio que se fueron adosando a ellas desvirtuando su carácter monumental. Se trata de estructuras con un elevado nivel de manipulación formal y constructiva que difícilmente resolverían las nuevas funciones y requerimientos técnicos relacionados con el acceso, como en la actualidad revela la práctica.
La Casa Militar, situada tangencialmente al Patio del León en su ángulo suroeste y con un acceso directo a través de su patio porticado, sí ofrece en sus dependencias de planta baja condiciones favorables para resolver dichas funciones. Mediante la operación planteada, se libera al Patio del León para convertirse en un espacio cualificado de recibimiento y estancia de público previo al acceso al Alcázar.
Las intervenciones propuestas dentro del proyecto básico, además, tratan de pasar desapercibidas, centrándose principalmente en la configuración unitaria del nuevo plano de suelo concebido como una superficie continua y adecuada al carácter de vestíbulo del Patio del León y son compatibles, asimismo, con la conservación de la vegetación existente.