La "naranja mecánica" demostró su poderío y se hizo con un triunfo más fácil de lo esperado ante una Bielorrusia (4-1) que, con un planteamiento muy defensivo, no consiguió remontar el resultado adverso casi desde el principio.
Los cuatro goles que marcó Holanda pudieron, con doblete de Quincy Promes y tantos de Davy Klaassen y de Vincent Janssen, pudieron ser fácilmente más.
Bielorrusia solo presentó cierta resistencia al comienzo de la segunda parte con un esperanzador tanto de Aleksei Ríos, jugador con ascendentes hispano-peruanos, pero el 3-1 finiquitó a los visitantes, que terminaron encajando una goleada.
Holanda salió enchufada desde el minuto 1, provocando continuas ocasiones de peligro. Bielorrusia esperó en su campo y apenas tomó la iniciativa, llegando a tener la pelota apenas un 29 % del tiempo durante los primeros 20 minutos. La "orange" aprovechó sus oportunidades y sus embestidas terminaron convirtiéndose en goles.
En el minuto 11 llegó el primero, en una combinación endiablada de pases rápidos llevó el balón hasta el área bielorrusa.
Politevich tuvo oportunidad de despejar, pero no fue lo suficientemente rápido y el esférico chocó en sus piernas, terminando a los pies de Promes. El holandés la controló, hizo un pequeño regate lateral y con un disparo raso y ajustado batió al portero.
Holanda no dejó de atacar y poco después Promes marcó su segundo gol. Un córner despejado por la defensa bielorrusa dejó un balón bombeado que cazó el delantero, dándole sin dejarla caer al suelo. La diosa fortuna hizo que la pelota chocara en un defensa, ajustando el tiro al palo izquierdo del portero.
A partir del 2-0, los holandeses bajaron una marcha y se tomaron el partido con más calma, hecho que aprovechó el conjunto visitante, aunque llegaron al descanso sin que el marcador se moviera.
Los bielorrusos, conscientes de que no tenían nada que perder, salieron del vestuario decididos a plantar cara. Holanda, sin embargo, se durmió en los laureles, lo que le costó recibir un gol que dejó mudo al estadio.
No obstante, el sueño de la remontada apenas duró nueve minutos. Davy Klaassen, con un fuerte tiro que terminó en las mallas del portero bielorruso, despertó a los visitantes.
El partido prácticamente se acabó ahí. Bielorrusia se dejó llevar y tuvo suerte de solo encajar uno más. Vincent Janssen tomó la pelota en el centro del campo y, de un esprint, se puso al borde del área. Allí le dio un zurdazo que se coló por la escuadra.
El resto del partido fue una fiesta para la afición holandesa, que pudo deleitarse con una "orange" que apenas tuvo rival.
El próximo lunes les espera el "hueso" del grupo: Francia.
- Ficha técnica:
4 - Holanda: Stekelenburg; Karsdorp, Bruma, Van Dijk, Blind; Strootman (Clasie, m.79), Klaassen, Wijnaldum; Janssen (Dost, m.83), Sneijder (Pröpper, m.46), Promes.
1 - Bielorrusia: Gorbunov; Polyakov, Politevich, Korzun, Kornilenko, Gordeichuk (Volodko, m.74); Krivets (Kislyak, m.67), Rios, Sivakov, Maevski (Hleb, m.46); Bordachev.
Goles: 1-0, m.15: Quincy Promes; 2-0, m.31: Quincy Promes; 2-1, m.47: Aleksei Rios; 3-1, m.56: Davy Klaassen; 4-1, m.64: Vincent Janssen.
Árbitro: Craig Thomson Ricci (SCO). Amonestó al visitante Rios (m.57)
Incidencias: encuentro correspondiente a la segunda jornada de la fase de clasificación al Mundial 2018, celebrado en el estadio Feyenoord, en Róterdam, ante la presencia de unos 40.000 espectadores.