El barrio de Santiago ha vivido -y vive- este fin de semana el feliz reencuentro con su monumental iglesia tras doce años cerrada al culto. Este sábado tuvo lugar la primera celebración eucarística -y su primera boda también- y en la tarde noche de este domingo, víspera del Día del Santiago, se celebrará una esperada Misa Flamenca que nació hace unos años como celebración de campaña que, en plena plaza y junto a la iglesia, sirvió para rogar por la reapertura que ahora se disfruta con un programa conmemorativo que ya ha dejado atrás la conferencia del arquitecto Emilio Yanes y la inauguración de la iluminación aportada por Endesa.
En la misa flamenca participarán artistas de los barrios de Santiago y San Miguel bajo la dirección de José Gallardo. Serán estrenadas plegarias dedicadas al Señor del Prendimiento, al Cristo de la Buena Muerte y a La Virgen del Dulce Nombre y se rescatará una dedicada a la Virgen del Desamparo obra del recordado Antonio Gallardo Molina. Actuarán, al cante, La Macanita, Antonio Agujetas, Eva Rubichi, Anabel Rosado, Gema la Cantarota, Paqui Méndez, Marimar Barea, Manuel de la Fragua y Pedro de la Fragua, al piano José Zarzana, Charo Gallardo y Manuel González, al violín Sophia Quarengui. Y a la guitarra Pascual de Lorca, Luis Rincones, José Carlos Pozo y Curro Romero.
Y se hizo la luz...
El punto de partida de la feliz conmemoración tuvo lugar este pasado viernes, cuando la iglesia de Santiago estrenó su nueva iluminación artística, que ha sido posible gracias a la colaboración de la Fundación Endesa y la Fundación Sevillana Endesa. En la ejecución de este proyecto se han empleado elementos eficientes y sostenibles de tecnología led y última generación, en línea con las más modernas técnicas en este tipo de trabajos ornamentales.
Bajo estas premisas se ha tratado de ahorrar energía y al mismo tiempo optimizar el confort visual, empleándose para ello focos de temperatura de color suave que respetan el color natural de los elementos. Entre las características de los focos y materiales utilizados destaca también su larga vida de funcionamiento, lo que permite aminorar los costes de mantenimiento al prolongar los tiempos de sustitución de las lámparas.
En concreto, la nueva iluminación del templo cuenta con 244 nuevos puntos de luz, distribuidos en 35 encendidos, con una potencia instalada de 6,21 kilovatios, lo que supone una reducción del 45,5 por ciento del consumo respecto a una instalación convencional. El ahorro anual previsto en emisiones de CO2 será de 2.600 kilogramos al año, calculando un encendido medio de cuatro horas diarias.
En el acto estuvieron presentes el presidente de Endesa y de la Fundación Endesa, Borja Prado; así como el presidente de la Fundación Sevillana Endesa, Antonio Pascual. Junto a ellos, el obispo de Asidonia-Jerez, José Mazuelos; la alcaldesa, Mamen Sánchez; el delegado del Gobierno, Antonio Sanz; el vicepresidente de la Junta de Andalucía, Manuel Jiménez Barrios; y distintos miembros de la Corporación municipal, como la exalcaldesa María José García-Pelayo.
Borja Prado se mostró especialmente satisfecho de haber podido colaborar a la recuperación de la iglesia de Santiago, incidiendo en su vinculación personal con la ciudad de Jerez, de la que es natural su esposa y donde crecieron sus hijos. De ahí que en su intervención aludiera a los recuerdos que mantiene del templo, fundamentalmente ligados a la salida a la calle de sus cofradías en Semana Santa.
En palabras de Borja Prado, proyectos como el que se han ejecutado en Santiago se encuentran “en el
ADN” de la Fundación Endesa, que tiene entre sus objetivos “resaltar la enorme importancia del patrimonio histórico y artístico de nuestro entorno”, desarrollando para ello “iluminaciones que ayudan a apreciar el inmenso valor de las obras arquitectónicas, tanto religiosas como civiles, que nos ha legado nuestro pasado”.
La nueva iluminación del templo provocó el aplauso de las cientos de personas que acudieron a este estreno, que contó además con el acompañamiento del órgano de Ángel Hortas y la trompeta de José David Monje.
La primera eucaristía
La iglesia de Santiago fue devuelta ayer al culto, doce años después, con una primera celebración de la Eucaristía que, a cargo de monseñor José Mazuelos, contempló la consagración del altar, que acoge reliquias de San Lorenzo y de Madre María de la Purísima, colocadas durante la celebración. Tras ello fue ungido e incensado y posteriormente revestido por dos religiosas Esclavas del Santísimo Sacramento ante una asamblea de fieles que llenó el interior del templo. A Mazuelos le acompañó una significativa representación del presbiterio diocesano y, entre los asistentes, diversas autoridades religiosas, políticas, civiles, militares, judiciales, sociales y culturales. También participó en la celebración la Capilla Musical Catedralicia, dirigida por Ángel Hortas.
