Guillermo Vives ha cumplido este miércoles su tercer día de huelga de hambre a las puertas del Ayuntamiento de San Fernando, ya que acumula siete años sin encontrar trabajo y en enero se podría quedar en la calle tras cumplirle el contrato de alquiler. Una casa en la que actualmente vive con su mujer y tres de los cuatro hijos que tiene.
Buenas palabras, buenas intenciones y poco más es lo que se ha encontrado a lo largo de estos tres primeros días de huelga y señala que "el cansancio empieza a notarse". Cabe recordar que Guillermo además ha sido operado hace pocos meses de una reducción de estómago a causa de un cáncer.
Las noches las pasa en el portal que hay situado justo enfrente del edificio del Ayuntamiento en la calle Isaac Peral, gracias a que la propietaria de la vivienda le ha dado todas las facilidades para que pueda refugiarse en el pequeño pasillo que conduce a la vivienda. Pequeños paseos diarios a lo largo de la acera situada enfrente el edificio municipal que culminan a las doce de la noche cuando se retira a descansar.