El número de inmigrantes y refugiados que han llegado este año a Europa por el Mediterráneo alcanza los 292.000, reveló hoy la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Las llegadas a Grecia han alcanzado las 181.000 y las registradas en Italia las 108.000, precisó en una rueda de prensa la portavoz del ACNUR, Melissa Fleming.
Además, el organismo anticipó que 3.000 personas, entre inmigrantes y refugiados, llegarán a diario en las siguientes fechas a Serbia tras haber entrado en Europa por Grecia y haber atravesado Macedonia.
El organismo humanitario indicó que trabaja con las autoridades serbias para hacer frente a las necesidades de al menos 10.000 personas.
A pesar del constante aumento del flujo de inmigrantes, la situación se ha calmado relativamente con respecto a las escenas de caos de este fin de semana en la frontera entre Grecia y Macedonia.
Las fuerzas de seguridad del último país intentaban impedir el cruce de miles de personas que tenía por objetivo continuar su ruta hasta Serbia y luego a Hungría, puerta de entrada de la Unión Europea y del Espacio Schengen.
El organismo advirtió de que gran parte de esos inmigrantes provienen de países en conflicto, como Siria o Afganistán, por lo que están "físicamente exhaustos y psicológicamente traumatizados, y requieren ayuda humanitaria y asistencia médica".
Preocupa, en particular, las condiciones de vida deplorables de mujeres, niños y ancianos.
"Es vital que estas personas sean tratadas con humanidad... que se les preste ayuda esencial, pero también que se respeten plenamente su dignidad y derechos como refugiados, solicitantes de asilo o inmigrantes", declaró Fleming.
Indicó que es comprensible la preocupación de los países frente a tal flujo de personas, pero también les recordó sus obligaciones de respetar principios como el de reunificación familiar o dar protección a personas con necesidades específicas.
Mientras, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) confirmó hoy que 2.373 inmigrantes han muerto en el Mediterráneo en el intento de alcanzar las costas europeas, con una gran mayoría que se dirigía hacia Italia.
El año pasado, en la misma fecha, los fallecidos en naufragios o situaciones violentas ocurridas durante el trayecto eran 2.081, precisó el representante de la organización, Joel Millman.
El portavoz dijo a Efe que a este ritmo podría llegarse a 5.000 muertos a finales de 2015, "lo que sería a la vez una tragedia y un récord absoluto".
La Guardia Costera Helénica ha señalado que las condiciones del mar empeora, lo que podría provocar un aumento de muertos en el Mar Egeo en los próximos meses.
