Nuestro entrevistado puede decirse que ha vivido mucho desde joven, pasando por las categorías inferiores del Club Polideportivo Ejido en primer lugar y después del Real Betis. Actualmente, Antonio Navas Vargas (13 de Febrero de 1995) milita en el Recreativo de Huelva desde la temporada 2012/2013, con el que, tras debutar en el juvenil, dio el salto al filial albiazul la temporada siguiente hasta el día de hoy. Estudiante de Magisterio, el almeriense siempre saca un tiempo para hablar de lo que le apasiona: El fútbol. Con la temporada terminada y el final funesto que tuvo para el primer equipo y el filial con sendos descensos de categoría, Antonio Navas, nos habla de sus sensaciones de cara a la temporada que se avecina con respecto al primer equipo en Segunda B como al filial en Primera Andaluza.
¿Cómo y dónde fueron tus inicios?
Todo empezó en El Ejido. Empecé en las escuelas municipales con 4 o 5 años y en benjamín de primero se interesó por mí el club de mi pueblo, el Polideportivo Ejido. Ahí empezó todo desde benjamines de primero hasta que me fui de allí en infantil de segundo.
¿Que te motivó para ser futbolista?
La motivación viene del día a día. Con cada entrenamiento o en el colegio. Allí siempre estábamos un grupo de amigos que estábamos tanto en el equipo como en el colegio jugando al fútbol. El día a día es lo que te motiva a ser futbolista.
¿Cómo te defines como futbolista?
Me defino como una persona trabajadora, sobre todo. Siempre intento dar lo máximo en cada jugada para ayudar, sobre todo, al equipo.
Casi siempre juegas en el lateral diestro pero también has jugado en otras posiciones como central. ¿En cuál te sientes más cómodo?
Yo empecé, desde muy chico, como central hasta que cuando fui a la selección de Almería y la Andaluza en infantiles me pusieron de lateral y a partir de ahí he estado en el lateral diestro. Pero siempre me he considerado muy polivalente. Si el equipo me necesita en el lateral zurdo o diestro, puedo jugar. También de central jugué en la época que estaba en el Betis y podría jugar en esa posición o incluso de extremo.
Tras tu paso por el Polideportivo Ejido, te llama el Betis con 14 años. Muy chico y tienes que dejar todo atrás. ¿Miedo o ilusión ante semejante cambio?
Nunca me pude imaginar que la adaptación allí iba a ser tan buena. Llegué a la residencia y allí me encontré con un grupo de 3 chavales con 14 años y la convivencia se hizo muy amena. Así, los años se pasaron rapidísimo hasta que con 18 años salí de allí.
Pasaste 4 años en el club heliopolitano. De esos años. ¿Con que técnico y momento te quedas?
Todos los técnicos siempre te aportan algo bueno. Te intentas quedar con lo mejor de cada uno. Cuando llegué, Gabino fue mi primer técnico cuando llegué y me ayudo mucho y fue uno de los que más confianza me dio. Gustavo también fue uno de los que me marcó para mí en el fútbol porque me dio confianza subiéndome de Cadete de primer año a cadete de segundo. Tadeo también fue un excelente entrenador que tuve allí. Todos los entrenadores que tuve en el Betis fueron, gracias a dios, bastantes buenos.
En la temporada 2011/2012, te llama el Recreativo y dejas Sevilla para recalar en Huelva. ¿Fue difícil cambiar la elástica verdiblanca por la albiazul?
No fue un cambio difícil. Tenía a una hora mis amigos. Además, hablamos de un equipo histórico, en cuanto al Betis, por la afición y la masa que mueve pero también hablábamos del Recreativo de Huelva, del Decano del fútbol español. Vine en juvenil de segundo y cuando me lo dijeron, acepté de cabeza. No pude negarme a la oportunidad de venir al Decano del fútbol español.
En tu primer año, jugaste mucha regularidad en el Juvenil e incluso apareces en escena en el filial. Con Cándido Rosado, juegas 5 partidos en Tercera División y con Juan Palma ya das el salto definitivo. ¿Difícil salto de categoría, no? ¿Te costó adaptarte?
Cuando llegué aquí, al final de liga, jugué cinco partidos con Cándido Rosado. Me dio al oportunidad y la intente aprovechar al máximo. Al año siguiente, en Juvenil de tercero, entró Juan Palma a entrenar al filial y ya estuve todo el año con el filial.
Hablando de tu pasado más reciente con el filial, hace dos temporadas conseguisteis la permanencia pero en esta recién acabada, habéis seguido el mismo sino que el primer equipo. Doble descenso en la entidad. ¿Nefasto año deportivamente, no?
Si, se podría decir. En lo deportivo es nefasto pero también ha habido otros aspectos extradeportivos que han influido en el resultado. A todo jugador le influye cuando tiene una serie de problemas pero eso no es justificación ninguna. Si podemos dar el máximo de nosotros, debemos darlo. Y no lo hemos dado del todo.
En tus temporadas como jugador del filial, también has entrenado en algunas ocasiones con el primer equipo. ¿Con que jugador o técnico te quedas en cuanto a relación?
El año que subí al primer equipo, en el que entrené varias veces, fue en la temporada 2013/2014, la última temporada de Sergi Barjuán. Sergi me llamaba mucho para los entrenamientos y solía contar con muchos canteranos para estos.
Hablando de Sergi Barjuán. ¿Piensas que fue un buen técnico del Decano?
Yo pienso que sí aunque no pudo conseguir el objetivo que era el ascenso. Se le criticó mucho pero pienso que hizo las cosas bien.
Con relación al descenso del primer equipo a Segunda B. ¿Crees que el descenso te puede ayudar el salto al primer equipo a tenor de las no tantas diferencias entre Tercera División y Segunda B?
Deportivamente, eso puede ayudar a los canteranos porque es una categoría que está más cerca. Vienes de una categoría, Tercera División, y Segunda B es un paso más pequeño que Segunda División. Pienso que cada uno de nosotros tendremos que trabajar para intentar estar ahí arriba.
Otro de los quebraderos de cabeza durante este año fue el tema económico. Hace poco se anunció que todos los atrasos a futbolistas estaban saldados. A día de hoy: ¿Están todas las deudas y atrasos saldados con los jugadores del filial?
A día de hoy, las deudas con todos los del filial no están saldadas. Están en ello y confiamos en ellos porque si no la mayoría no estaríamos aquí. Nos han prometido que dentro de poco estará todo resuelto.
La pasada temporada fue muy convulsa para el primer equipo, aparte de nivel institucional, a nivel deportivo en cuanto a entrenadores. Tres técnicos en una sola temporada, José Luis Oltra, Juan Manuel Pavón y José Domínguez. Pavón, actual técnico del filial, dirigió 7 partidos al primer equipo dejándolo a punto de salir del descenso y recuperándolo anímicamente. ¿Crees que la sustitución de Pavón por José Domínguez fue un error?
Ahora es muy fácil opinar. Siempre que hay un descenso, se intenta echar las culpas a uno u otro. ¿Un error? No. Cada técnico intenta aportar lo máximo de sí mismo. En esos siete partidos, Pavón aportó lo máximo de él mismo e intentó sacar resultados. Después llegó José Domínguez y trabajo igual que Pavón. Esperemos que este año los resultados acompañen al esfuerzo.
Sobre José Domínguez. ¿Cómo es tu relación con él?
No he tenido todavía la oportunidad de hablar con él. Aún no he sido llamado a entrenar con el primer equipo y no he tenido la ocasión de intercambiar sensaciones con él.
Es inevitable comparar a Pavón, actual técnico del filial, con Juan Palma, técnico del Recre B las dos ultimas temporadas. ¿Qué diferencias hay entre uno y otro?
Si te pones a analizar, tienes que hacerlo de una forma muy concreta. Son técnicos que le encanta la intensidad, que les gustan el trabajo. Diferencias claras no hay. Cada uno tiene su forma de entrenar, de actuar y cada uno te intenta aportar lo máximo que pueda.
Parando por la temporada actual, el filial está en Primera Andaluza. Tras jugar tres partidos de pretemporada. ¿Cómo son las sensaciones de cara a la temporada? Si no se asciende: ¿Se puede decir que la temporada habría sido un fracaso?
El filial llevaba bastantes años sin estar en Primera Andaluza y eso es una motivación la cual el vestuario tiene que tener que es devolver al filial donde se merece y donde antes estaba. Hemos ganado esta pretemporada al Punta del Caimán y al Villablanca y perdido ante el Castilleja y el equipo está trabajando muy bien. La gente está muy comprometida y pienso que este año se puede hacer un gran año para volver donde se merece el filial del Decano. ¿Se podría llamar fracaso si no se asciende? Según por donde lo mires. Si del filial, al fin y al cabo, sale ocho jugadores jugando con el primer equipo, no puedes llamar fracaso a esa temporada más que nada porque uno de los fines del filial es exportar jugadores al primer equipo. Deportivamente, el objetivo es el ascenso y sería una temporada sin cumplir el objetivo en ese ámbito.
Canteranos como Antonio Domínguez o Dani Molina han dado el salto al primer equipo. ¿Que crees que le hace falta a cualquier jugador de un filial para dar el salto a la primera plantilla?
Sobre todo trabajar. Trabajar día a día y como el que más. Los canteranos venimos de abajo y siempre, aunque este feo decirlo, tenemos que trabajar más que ninguno. El trabajo del presente siempre será recompensado en el futuro.
Por último: ¿Que mensaje le mandarías a la afición?
Ahora, más que nunca, es cuando debemos de estar todos juntos. La unidad es primordial ya que se ha sufrido ese descenso y ahora es cuando se tiene los recreativistas y el recreativismo que hay, como anima la gente a ese Decano al que le hace falta ese apoyo como nunca.
