El alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, acompañado por la teniente de alcalde delegada de Salud y Consumo, Juana Cid, ha mantenido este mediodía una reunión con el director de la Clínica “Virgen de La Palma”, Andrés Blasco, y una representación de sus trabajadoras, a fin de conocer de primera mano la última hora generada por la decisión de la Junta de Andalucía de suspender el concierto que mantenía con este centro, lo que obligará a los algecireños a tener que desplazarse hasta en cinco ocasiones a Jerez de la Frontera para someterse a intervenciones de cirugía mayor ambulatoria.
Blasco, director de la clínica, denunció irregularidades en el proceso de urgencia del concierto y advirtió que interpondrá una demanda contra la Consejería de Salud por ello. Pero, ante todo, solicita una moratoria de cuatro meses para adaptarse a las exigencias de la Junta y que se pueda mantener el concierto.
La primera autoridad municipal también les ha explicado las gestiones que ha venido realizando en este sentido, y que espera continuar mañana “si no aplazan nuevamente la reunión, abordando este asunto con el subdelegado de la Junta de Andalucía en la comarca”.
“Que los algecireños tengan que hacer eso es una auténtica locura, y como mínimo, así lo describirían los jerezanos o los gaditanos si tuvieran que venir a operarse a Algeciras. A los enfermos de Algeciras y a sus familiares no se les puede castigar así”, explica el primer edil.
Landaluce ha recalcado que “con la Clínica Virgen de La Palma no me une ningún interés de tipo personal, solo el de que soy alcalde de los algecireños y hemos de evitar un desmán, una barbaridad, una agresión, un despropósito, un desprecio a los enfermos y a sus familiares, y también, para evitar que se pierda un solo puesto de trabajo”.
El alcalde critica que “es la primera vez que sin causa social, se abre este proceso de convocar un concierto por procedimiento de urgencia”, al tiempo que ha acusado a la Junta de Andalucía “de dejar morir poco a poco al hospital de Algeciras”.