La Consejería de Enseñanza de la Generalitat ha declinado las peticiones de la ayuda de 6.000 euros para escolarizar en castellano porque incumplen las condiciones establecidas, ha señalado la consellera Irene Rigau este viernes.
En declaraciones a TV3 recogidas por Europa Press, la consellera ha acusado al Ministerio de Educación de "buscar firmas o peticiones, normalmente de padres que ya estaban en una escuela privada privada, y que no fueron allí por el tema de la lengua, sino por otras cuestiones".
Recientemente, el ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, señaló que su Ministerio había recibido 362 peticiones para escolarizar en castellano, ante lo que la consellera ha admitido "un pulso" entre ambas administraciones.
"El Estado intenta demostrar que sí que hay padres, pero nosotros no tenemos ningún caso planteado de los que se ha dirigido al ministerio que cumpla las condiciones establecidas", ha subrayado Rigau.
Según Rigau, no se puede intentar que estas peticiones "sirvan por el tema de la lengua, porque hay un por el que tienes que haber pedido una escuela", entre otras cosas.
Sobre el informe de la Fundación Jaume Bofill que esta semana alertaba sobre un aumento de las desigualdades educativas en Catalunya entre 2003 y 2012, la consellera ha destacado que las políticas educativas han conseguido reducir el número de alumnos que se encuentran en la franja baja de los resultados y ensanchar los alumnos que tienen un nivel medio.
La consellera ha destacado que "el ámbito socioeconómico es un determinante, pero lo son tanto o más, las expectativas" en la enseñanza, ha dicho, y ha puesto como ejemplo el mayor impacto en los resultados que tiene la motivación de unos padres con una situación económica difícil, que la de unos progenitores con buenas nóminas pero que se despreocupan por la enseñanza de sus hijos por ir demasiado ocupados.