La Diputación de Málaga ha aprobado el presupuesto para la construcción de la famosa pasarela en el fondo del Tajo. En concreto, se ha dado luz verde a una inversión de 300.000 euros para una infraestructura que, según Isabel Barriga, la teniente de alcalde y concejal de Turismo, podría recibir anualmente unas 500.000 visitas, frente a las 100.000 que en la actualidad visitan cada año de media el centro de interpretación del Puente Nuevo.
“Es un proyecto que va a enseñar una imagen muy distinta a la que ahora conocemos del Tajo y el Puente”, afirmó la concejal, quien subrayó cómo estas nuevas instalaciones estarán adaptadas a las visitas familiares, con todos los elementos de seguridad necesarios para ello.
La pasarela, con más de 300 metros, conectará el Puente de San Miguel (Puente Viejo) con la plaza de María Auxiliadora, a lo largo de más de 300 metros. Tendrá una anchura de 1,80 metros, a unos tres metros sobre el nivel del Guadalevín, para soportar las crecidas del río. La intención del Ayuntamiento es que las obras puedan comenzar a lo largo del mes a abril, “una vez que haya pasado la temporada fuerte de lluvias”, precisó por su parte la alcaldesa de la ciudad, Mari Paz Fernández.
Tras garantizarse el dinero, ahora sin embargo son necesarias las últimas autorizaciones, entre otras la de organismos como la Consejería de Cultura, que hace varias semanas reclamó más información sobre el proyecto al Ayuntamiento para estudiar sus posibles impactos, especialmente los de tipo visual.