La Dirección General de Tráfico va a poner en marcha a partir del próximo lunes una campaña de control de distracciones al volante para concienciar a los conductores de la necesidad de mantener la máxima atención mientras se está conduciendo. Los datos de siniestralidad indican que hablar por el móvil, programar el GPS, manejar la radio o fumar cuando se conduce disparan los riesgos de accidente.
La campaña, que se desarrollará a lo largo de la próxima semana (del 3 al 9 de junio), ha sido presentada por el subdelegado del Gobierno, Juan Lillo, que estuvo acompañado por el jefe provincial de Tráfico, Juan Diego Ramírez, quienes han puesto de manifiesto que la distracción es la principal causa de muerte en los accidentes de tráfico. Así, de los 20 accidentes mortales que se registraron en las carreteras y vías urbanas de la provincia el pasado año, en la mitad de los casos la distracción fue la causa principal, a veces acompañada de una velocidad inadecuada. En este sentido, Juan Lillo aconseja a los conductores “aprovechar las nuevas tecnologías con sentido común y emplearlas cuando no se está conduciendo”.
Desde la Jefatura Provincial de Tráfico se ha pedido a los ayuntamientos de la provincia que se sumen con su Policía Local a la campaña, denunciando el uso de dispositivos, como el móvil y los navegadores, mientras se conduce.
En la campaña llevada a cabo en marzo del pasado año, fueron controlados 27.343 vehículos en la provincia, siendo multados 121 conductores, en la mayoría de los casos por ir usando el móvil (92), mientras que en otros 4 casos por llevar cascos para oír música y en los tres restantes por ir manipulando el dispositivo de GPS.
La utilización del teléfono móvil cuando se está al volante genera un elevado riesgo de distracción, como revelan diversos estudios, sin embargo pese a la peligrosidad son numerosos los que los utilizan.
