La jienense María Jesús Oya Amate, presidenta de la Cooperativa Farmacéutica de Jaén (Jafarco), ofrecerá el pregón del tiempo de Gloria el domingo,a las 12 horas, en el Teatro Darymelia de la ciudad.
Organizado por la Agrupación de Cofradías, recibió la noticia de manos del presidente José Paulano. “Noté el peso de la responsabilidad al saber que ocuparía una tribuna en la que se han ofrecido ilustres intervenciones de pregoneros. Me sentí honrada y complacida, pero un tanto abrumada”, valora.
En cuanto a la preparación del pregón, María Jesús Oya asegura que estuvo a punto de declinar la invitación ya que tenía “el alma destrozada” por el fallecimiento de su marido. “Aunque estuve sumida en la tristeza acepté, pues en vida, mi marido me animó para que fuera pregonera y tras su muerte fueron mis hijos, toda mi familia y mis amigos los que me lo pidieron”, apunta.
Después de una situación tan difícil ha querido que su pregón refleje que tras la Semana de Pasión se ha de vivir el tiempo de Gloria que supone que “la muerte, compartida con Cristo, es vencida por la resurrección y eso afianza a los creyentes en el camino de la vida frente a la muerte”.
En su pregón defenderá que es “imprescindible vivir desde la fe porque es el pilar básico que sustenta las creencias”.
Transmitirá un mensaje de fe profundamente arraigada, apoyada en la caridad y en la esperanza. Igualmente, recorrerá, con breves pinceladas, cada una de las hermandades de Gloria de la ciudad y lo que significan en su vida.
“Aspiro a ofrecer un pregón dicho desde la fe, sencillo, preparado con el corazón. Seguramente nada que no se haya dicho antes por los ilustres pregoneros que me han precedido. Lo importante es con el sentimiento con el que se exprese” puntualiza.
Subirá a la tribuna con “mucha ilusión, gran responsabilidad y muchos nervios”, pero con la esperanza de que su “modesto mensaje llegue al interior” de sus oyentes. Es la primera vez que pregona y está segura de que “va a ser una grata experiencia”.
Asegura que el trabajo de las Hermandades de Gloria ha evolucionado de forma “positiva” y que la simbología del tiempo de gloria en la ciudad “está en la devoción y la alegría con la que se viven los cultos y actos festivos”.
Como camarera de la Virgen de la Capilla, la pregonera asegura que las fiestas en honor a la Patrona las vive con sentimiento y devoción.
Ayer fue recibida por el alcalde, que le entregó un recuerdo como pregonera del tiempo de Gloria.