El Grupo Popular del Parlamento Andaluz llevará el próximo miércoles a la Comisión de Sanidad una proposición no de ley para que se inicie “de forma inmediata” la rehabilitación del centro de salud de Campillo Bajo.
El partido recuerda en la propuesta que la Junta se comprometió hace dos años a reformar el edificio para que la ciudad pudiera contar con un segundo ambulatorio, pero aún ni siquiera han comenzado las obras.
Según la vicesecretaria de Organización del PP en Andalucía, Ana Corredera, el motivo son los “recortes intencionados” de la Junta en materia de sanidad, de los que aseguró recientemente que están afectando especialmente a municipios gobernados por el Partido Popular. “El centro de la avenida de la Estación no veía a resolver los problemas de Antequera cuando nosotros venimos ya reivindicando el tercero por la población que tenemos”, ha manifestado en una comparecencia a las puertas del antiguo ambulatorio.
Para concejal delegado de Salud en el Ayuntamiento de Antequera, José Luque, contar sólo con centro de salud con un centro de salud no es suficiente. “Se nos acusa de crear alarmismo pero no. Lo que estamos haciendo es ser realista y reivindicativos”, ha comentado sobre una petición que considera lógica para poder mejorar la asistencia médica en Antequera.
Enmienda
Corredera también ha dado a conocer que a la propuesta que ya llevan solicitando desde hace dos años se va a sumar una enmienda del propio partido para que si en un plazo determinado no se actúa en el edificio, éste pueda emplearse para otros usos sociales o culturales.
Como ha recordado el alcalde de Antequera, Manuel Barón, la intención del Ayuntamiento es, si se permite, adaptarlo para que pueda acoger las instalaciones de la Escuela de Música y del Conservatorio.
En este sentido, el regidor ha lamentado que la Junta aún no haya contestado a una carta que se envió el 7 de junio de 2012 sobre la posibilidad de dar un nuevo uso al edificio. Igualmente no comprende como después de más de tres décadas con las competencias de Sanidad, el Gobierno regional todavía no ha hecho los trámites para recepcionar el edificio, que sigue estando en manos del Estado.
