El Gobierno local ha pedido a Acasa, la concesionaria del servicio de Ayuda a Domicilio, que prorrogue su periodo de actuación a la espera de que el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía firmen un nuevo convenio que garantice la prestación del servicio.
La alcaldesa, María José García-Pelayo, explicó ayer que la intención del Gobierno es que Acasa permanezca “más tiempo” porque ambas administraciones deben rubricar estos próximos días un nuevo convenio, que dará paso a la publicación del nuevo pliego de condiciones en base al cual se regirá la concesión del servicio.
García-Pelayo aseguró que en estos días se están manteniendo “muchas reuniones” con la Junta para perfilar ese nuevo convenio, que en todo caso debe garantizar las aportaciones de la Administración autonómica al servicio. “Lo que no puede pasar es lo que está ocurriendo ahora, y es que las resoluciones de la Junta llegan tarde y los pagos, más tarde aún, porque eso afecta al cobro de las trabajadoras”, explicó.
La Junta ha trasladado ya su intención de reducir el coste de la hora del servicio, fijado en casi 15 euros de los cuales aporta 13. El Consistorio abona estos días 200.000 euros a Acasa, una cantidad que unida a las transferencias anteriores le pone al día en los pagos. El problema es que la Junta adeuda 1,8 millones.
