Ni calabazas humanizadas ni monstruos, aunque también. La AVV Barriada Bazán celebró la fiesta de origen celta de Hallowen con algo más "horroroso" que los disfraces y eligieron un decorado alusivo a todas las empresas y comercios que han desaparecido en la ciudad y en el barrio en los últimos años.
Tuvo lugar este miércoles en la plaza de la Sagrada Familia como una forma de reivindicar a las administraciones el problema acuciante de estos tiempos y solicitarles su ayuda. La decoración ha sido realizada por los niños del barrio, colectivos de mujeres y la propia asociación con la colaboración de muchos vecinos.
No es la primera iniciativa novedosa que pone en marcha la directiva bazanera, ya que también se ha creado una bolsa de trabajo en la propia barriada para que los vecinos puedan llamar a realizar pequeños trabajos a otros convecinos en paro o en mala situación económica.