La Virgen de las Angustias de la hermandad de las Tres Caídas recibió como ofrenda en el primer día del triduo en su honor, una diadema dorada ofrenda de los hermanos. El celebrante de estos cultos, el Padre Marco Antonio Huelga de la Luz, bendijo a la diadema en el ofertorio y procedió inmediatamente a colocar la diadema sobre la cabeza de la imagen, que hasta entonces permanecía sin corona o diadema alguna y muy bien vestida.
Los cofrades de las Tres Caídas que este año pudieron hacer su segunda salida procesional, tras retrasar la hora de su salida, siguen trabajando con ilusión por hacer de la joven cofradía una referencia en la Semana Santa isleña y ahí están trabajando a destajo para completar el misterio y para crecer como hermandad, sin dejar a un lado dotar a la Virgen de las Angustias de los enseres propios para el culto interno.
La hermandad celebró anoche su función con la participación de un gran número de hermanos.