El año pasado culminó el desarrollo del Plan de Excelencia Turística, promovido en su momento por el Gobierno central, la Junta de Andalucía y el propio Ayuntamiento. Recientemente, las dos últimas administraciones han firmado un nuevo documento que trata de dar continuidad al anterior, incidiendo en la comercialización exterior de la marca y en la optimización de todos los recursos turísticos.
Uno de los caminos en los que se viene trabajando desde hace ya varios años tiene como objetivo ofrecer al visitante una oferta tematizada. Así, se han puesto en marcha iniciativas encaminadas a captar el interés de los amantes del caballo (Rutas ecuestres) o de quienes pretenden descubrir los secretos del jerez (Rutas del vino).
En lo que a recursos vinculados al mundo del caballo se refiere, destaca por encima de todo la actividad propia de la Real Escuela Andaluza del Arte Ecuestre, que ofrece espectáculos todos los martes y jueves del año. En 2009, además, se incorpora una gala mensual -los sábados- que se enmarca en un paquete turístico de fin de semana destinado a las familias.
Sin embargo, los amantes del caballo venían demandando algo más. Jerez ofrece alternativas para el público más exigente, sumando a esos espectáculos visitas a yeguadas y cortijos o paseos a caballo por el medio natural. A todo ello hay que sumar el trabajo de artesanos dedicados al herraje o la guarnicionería.
Apuesta por el enoturismo
Algo parecido está ocurriendo con el turismo enológico. Hasta no hace demasiado tiempo, la actividad parecía limitarse a la tradicional visita de la bodega, gracias a la cual poder conocer el proceso de elaboración y crianza del jerez. Ahora se apuesta por maridar los vinos con la gastronomía propia de la tierra, lo que permite que bodegas y restaurantes caminen de la mano en la búsqueda de un mismo objetivo.
De manera paralela, es posible visitar las viñas donde se produce la uva que da origen a los vinos y adquirir productos en origen, algo muy apreciado por quienes gustan de saborear la cultura del vino. Todo ello acompañado del imprescindible recorrido por las calles de la ciudad intramuros, que en algunos casos, como ocurre en el barrio de San Mateo, no son más que las prolongaciones en el exterior de las propias bodegas.
El flamenco es el tercer pilar que sustenta a la oferta turística de Jerez. La celebración desde hace ya más de una década del Festival de Jerez ha servido entre otras cosas para advertir la trascendencia que esta genuina manifestación artística tiene en el exterior. Anualmente acuden a la ciudad miles de aficionados con el único objetivo de acercarse a la cuna por antonomasia del cante y el baile. Los cursos formativos del Festival de Jerez ponen de manifiesto el creciente interés que el flamenco despierta en los rincones más insospechados del mundo.
Alrededor de un millar de alumnos participa anualmente en estos cursos, que les permite perfeccionar sus conocimientos de la mano de artistas consagrados. Gracias a ello han proliferado en la ciudad academias de baile y toque, otroras reservadas a aficionados de la tierra y ahora convertidas en lugar de reunión de personas de los cinco continentes.
El Ayuntamiento de Jerez, consciente del enorme potencial turístico de esta expresión artística, ha iniciado ya los preparativos de Jerez 2013, el Año del Flamenco. El reto no es otro que el de convertir todo este fenómeno en una industria perfectamente consolidada.
Los caballos, el vino y el flamenco son sin duda los tres grandes reclamos turísticos de la ciudad. Con todo, nada sería lo mismo si esos ingredientes no contasen con un buen plato en el que lucirse.
Y ese plato no es otro que una ciudad cuyo centro histórico ha logrado resistir el desarrollismo urbanístico que caracterizó a la segunda mitad del pasado siglo XX. Baste para ello comparar la ciudad intramuros actual con la que se plasma en antiguos grabados o en las primeras fotografías que se conservan de la ciudad.
El corazón de Jerez permanece inalterable al inexorable paso del tiempo y ese es sin duda un aspecto que los turistas saben valorar en su justa medida.
Mención especial merecen los barrios de San Miguel, Santiago o San Mateo, convertido casi en una gran bodega al aire libre. Esa singularidad del centro histórico se acompaña de una amplia oferta monumental, en la que tienen parecido protagonismo iglesias de los siglos XVI y XVII y las casas palacio en las que residió la nobleza local.
En la relación de edificios religiosos destaca sobremanera la Cartuja de Santa María de la Defensión, que se encuentra en los alrededores de la ciudad. Notables son los conjuntos de las iglesias de San Miguel, Santiago, San Mateo, San Dionisio, San Juan de los Caballeros o San Marcos; a los que debe sumarse la Catedral.
En cuanto a los palacios, destacan los de Bertemati (actual sede del Obispado de Asidonia-Jerez), Camporreal, Dávila, Domecq, Pemartín (sede del Centro Andaluz de Flamenco), Pérez-Luna o Villavicencio, integrado en el Conjunto Monumental del Alcázar. A todo ello debe sumarse el indudable atractivo de edificios que salpican el callejero de la ciudad. Lugar de relieve debe ocupar el Ayuntamiento, la estación de ferrocarril o el Mercado Central de Abastos, sin dejar de lado el Gallo Azul o el Teatro Villamarta.
Caballos, vino, flamenco y patrimonio histórico y artístico justifican la visita a Jerez. Pero aún tiene la ciudad otro atractivo, que no es otro que el de su privilegiada localización geográfica, que la sitúa a muy pocos kilómetros del mar y la sierra, facilitando la excursión al visitante. En coche, autobús o tren, todas las opciones de desplazamiento son buenas y rápidas. La red de carreteras, autovías, autopistas, así como de ferrocarril son excelentes, pudiéndose acceder a paisajes, poblaciones y rutas absolutamente diferenciadas en un radio de acción muy corto e inmediato.
A sólo 15 minutos de Sanlúcar, el inigualable Parque Nacional de Doñana, a 12 minutos El Puerto de Santa María y sus playas, a sólo 20 minutos de Cádiz y la bellísima Ruta Atlántica, a poco más de 20 minutos de Arcos, ciudad blanca y monumental, entrada de la Ruta de los Pueblos Blancos.
Además, Jerez forma parte esencial de la Ruta del Vino y del Toro, pudiéndose visitar poblaciones tan dispares y atractivas como Chiclana, Vejer o Medina Sidonia, en un breve espacio de tiempo.
Pocos destinos turísticos pueden presumir de ofrecer al visitante tantos y tan variados atractivos, capaces de justificar no ya una escapada de fin de semana, sino una estancia aún mayor si lo que se pretende es conocer con detalle una provincia cuyo centro neurálgico se encuentra precisamente en Jerez.
—El calendario de 2009—
Semana Santa
Declarada de Interés Turístico Nacional, se celebra este año del 5 al 12 de abril. Una suma de sensaciones única y singular que no deja a nadie indiferente.
Feria del Caballo
En esta ocasión se celebrará entre el 10 y el 17 de mayo. Esta fiesta está declarada de Interés Turístico Internacional y tiene como escenario el singular marco del parque González Hontoria. Incluye paseo de caballos y corridas de toros.
XIII Festival de Jerez
El Teatro Villamarta se convierte del 27 de febrero al 14 de marzo en el epicentro de una cita cada vez más consolidada en el calendario flamenco internacional. A los numerosos espectáculos hay que sumar una amplia relación de cursos.
Mundial de Motos
El Circuito de Jerez acogerá del 1 al 3 de mayo el Gran Premio de España de Motociclismo, prueba puntuable para el Campeonato del Mundo de la especialidad.
4,8 millones para el nuevo plan
El consejero de Turismo, Comercio y Deporte, Luciano Alonso, y la alcaldesa de Jerez, Pilar Sánchez, presentaron el pasado 18 de junio el nuevo Plan de Turismo para Jerez, dotado con 4,8 millones de euros. El objetivo fundamental es fortalecer la posición de Jerez como destino turístico de excelencia en los mercados nacional e internacional. Esta iniciativa refuerza la competitividad y configura una oferta diversificada y basada en productos específicos locales, especialmente de los segmentos cultural, ecuestre, de congresos, de flamenco, de naturaleza y enológico. De igual modo, el plan impulsa iniciativas empresariales de mejora de la rentabilidad del sector y de creación de empleo estable y de calidad. El Plan Turístico de Jerez continua y complementa los proyectos desarrollados por 2004 por la Junta, el Ayuntamiento y el Gobierno central, dentro del Plan de Excelencia Turística. Su desarrollo se lleva a cabo mediante un convenio entre la Junta y el Ayuntamiento, en el marco de los planes que promueve la Administración autonómica para fomentar una oferta innovadora en poblaciones de más de 100.000 habitantes. Este programa cuenta ya con la participación de Almería, Córdoba, Granada, Marbella, Jaén y Sevilla. El marco presupuestario de la actuación se divide en tres anualidades, comprendidas entre 2008 y 2011 y es cofinanciado al 65 y el 35 por ciento, respectivamente, por la Consejería de Turismo, Comercio y Deporte y el Ayuntamiento de Jerez, que aportará 1,7 millones de euros.