Fuentes del Centro Penitenciario han informado a Europa Press de que el reglamento sólo permite conceder un permiso extraordinario en casos muy concretos como el fallecimiento o enfermedad grave de un familiar directo del preso o el alumbramiento de un hijo, y la situación de Montes Neiro no se ajusta a ninguno de estos condicionantes.
Por ello, la Junta de Tratamiento de la cárcel, un órgano colegiado integrado por el director, un psicólogo, juristas, un educador, un trabajador social, el jefe de Servicio, una subdirectora de Tratamiento y un supervisor médico, ha decidido emitir una decisión desfavorablemente a la solicitud presentada por el reo.
Aunque por norma general es el propio centro quien comunica por escrito al preso la decisión, en este caso lo ha hecho su abogado, Félix Ángel Martín, de manera verbal aprovechando que se encontraba en la prisión cuando se ha tomado la decisión.
Esto se produce después de que el abogado de Miguel Montes Neiro presentara este martes un escrito ante la Audiencia Provincial de Granada solicitando que se le aplique la liquidación de todas las condenas preventivas que acumula después de que el Gobierno le haya concedido el indulto parcial y en cumplimiento de la sentencia del Tribunal Supremo que ordena esta liquidación.
Según informó a Europa Press el letrado, la Audiencia Provincial ha aplicado esta liquidación a la última condena de Montes Neiro, pero no al conjunto de penas como ordena el Alto Tribunal, cuya sentencia fue notificada este martes a la Audiencia de Granada.
Así, ha confiado en que no haya más impedimentos legales para descontar las condenas preventivas, ya que resulta clave para que el preso más antiguo de España obtenga la libertad. Pese a esto, Félix Ángel Martín se ha mostrado consciente de que los plazos pueden alargarse debido al periodo navideño y es posible que este asunto no se resuelva hasta que pasen las fiestas. De hecho, consideraba que la opción más rápida para que Miguel pase lo que queda de las Navidades en casa con su familia es que la cárcel de Albolote (Granada) le concediera el permiso, un extremo que finalmente ha quedado descartado.
