"El Barcelona es un buen equipo, con jugadores de mucha calidad y tienen una rutina muy buena, pero es injusto para el resto de equipos decir que el Barça es el mejor del mundo. Cada uno tiene su estilo de juego. Dentro del nuestro, el Real Madrid es el mejor del mundo, y ellos son los mejores dentro del estilo que tienen", argumenta, en una entrevista a 'O Jogo'.
El luso, que asegura estar encantado en el equipo blanco, considera que éste puede ser un año triunfal para los suyos, en el que conquisten por fin la ansiada 'Décima'. "Me falta ganar la Liga de Campeones. Ya logré la Liga y la Copa del Rey. Creo que será este año, estamos bien, tenemos un equipo muy fuerte y, como en la selección, todos remamos para el mismo lado. Tenemos todo para ganar muchos títulos", destaca.
Pilar importante tanto de su selección como del Real Madrid, considera que el verdadero ejemplo de profesionalidad lo representa su compañero Cristiano Ronaldo. "Es más una suerte tener a Ronaldo, es el mejor del mundo y un profesional ejemplar, elogia, sintiéndose "feliz" y "afortunado" de poder jugar a su lado.
Por otra parte, Pepe, que espera que el Oporto sea el campeón de la Liga lusa, destaca que para el Real Madrid ficharía a Fernando (Oporto) y a Gaitán (Benfica), mientras que cree que Moutinho, a quien se coloca en la agenda del Barcelona, no tendría hueco, "por que está Ozil". "Pero no tengo duda de que Moutinho jugará en un grande del fútbol europeo".
Además, asegura sentirse "triste" por la "situación delicada" que se ha vivido con Bosingwa y Ricardo Carvalho, a quienes Paulo Bento aparcó de la selección: "Tengo que respetar a todos, por un lado, al seleccionador, por otro, fui compañero de Bosingwa y ahora lo soy de Ricardo Carvalho. Lo que digo es que son dos grandes jugadores, que hacen falta a cualquier selección".
"Mi amistad con Ricardo Carvalho no ha sufrido ningún problema. Siempre le respeté y él siempre me respetó. Desgraciadamente mencionó mi nombre y puso un ejemplo que la gente ha mal interpretado, pero nunca tuve ningún problema con Ricardo Carvalho, ni mucho menos. Todo ser humano tiene derecho a equivocarse y a ser perdonado", valora.
"Es difícil para él, como lo sería para cualquier jugador, pero más para él que dio todo a la selección. Tuvo un acto que nadie esperaba de él, pero, como compañeros tenemos que apoyarlo y ayudarlo. Ahora es una decisión que recae en el entrenador, si debe o no llamarle", añade.
Finalmente, y pese al paso del tiempo reconoce que sigue sin "conseguir explicar" qué ocurrió para que agrediese a Javi Casquero. "Cuando estoy trabajando, defiendo mi profesión al cien por cien. Después de haber tenido al Barcelona a 13 ó 14 puntos, si ganamos al Getafe, no poníamos a uno. En el descanso el míster nos dijo que podíamos perder con cualquier equipo, pero que no podíamos tirar todo el trabajo que habíamos hecho para acortar la distancia", recuerda.
"Entré en el campo con una fuerte voluntad y determinación, pero comentí un penalti. Durante el partido, el jugador del Getafe se acercó a mí y provocarme y en ese momento reaccioné mal. Fue un acto impensable, por el que ya he pedido disculpas", sentencia.
