Fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid han explicado a Europa Press que el supuesto agresor, que se quitó la vida tras el tiroteo, había sido detenido por la policía en diversas ocasiones desde que el hombre tenía 20 años.
Así, el hombre de 34 años contaba con antecedentes policiales por tráfico de drogas, por lesiones, por malos tratos, por amenazas, por desobediencia y resistencia a la autoridad.
El Grupo V de Homicidios se encarga de la investigación, que, en principio ha descartado que hubiese relación familiar entre el supuesto autor de los hechos y la mujer embarazada fallecida. Los agentes policiales registrarán la vivienda del agresor a lo largo del día.