El citado edificio está catalogado en grado tres y es propiedad de la empresa Inversiones Espasur. , cuyo propietario ha comunicado su intención de acometer un proyecto para la reparación integral cuando obtenga los créditos necesarios.
La zona donde se encuentra el inmueble está acordonado desde que a primeros de año cayeran unos cascotes a la vía pública. Desde entonces se ha estado a la espera de que el propietario cumpliera con una orden de ejecución emanada de Disciplina Urbanística. No obstante, debido a que en los últimos días se ha repetido la caída de elementos a la vía pública, el Ayuntamiento ha visto la necesidad de intervenir.
El edil delegado de Urbanismo y Patrimonio Histórico, Diego González de la Torre, aseguró ayer que el Ayuntamiento “no ha estado inactivo ante este problema”, pero que tales actuaciones “siempre conllevan muchas dificultades”, lo que ahora se acentúa aún más por la crisis y los problemas para la obtención de créditos que permitan realizar los proyectos.
La Trocha
El anuncio del Consistorio coincide con la denuncia de la Asociación en Defensa del patrimonio La Trocha, que considera que las vallas colocadas como protección son “totalmente insuficientes, ya que su función protectora no se ejercerá en su totalidad (ni en un 50%) en los próximos desprendimientos de enfoscados o vuelos de balconeras, con el consiguiente peligro para los transeúntes”.
El colectivo solicita además que la fisura situada en la parte alta un su zona central, “se debería tratar y coser en previsión de males mayores” debido a sus dimensiones.