El único debate electoral de cara a las municipales de este próximo domingo –organizado y emitido ayer por 7 TV Jerez- no dejó vencedores ni vencidos y sí la sensación de que al igual que ocurrió en las convocatorias de 2015 y 2019 el escenario se presenta muy abierto y dependiente de posteriores alianzas entre las diferentes fuerzas políticas.
El debate dejó claro igualmente que estamos ante una lucha de bloques con Mamen Sánchez (PSOE) y María José García-Pelayo (PP) como únicas aspirantes reales a formar Gobierno.
En ambos casos mantuvieron una actitud conservadora, tratando de evitar cualquier error que pudiera lastrarles la recta final de la campaña. Tanto Sánchez como García-Pelayo saltaron al terreno de juego bajo la premisa de no perder y aparentemente desde la convicción de tener controlado el partido del domingo.
Raúl Ruiz-Berdejo (La Confluencia) defendió la acción del Gobierno de estos últimos cuatro años y fue especialmente crítico con el pasado de García-Pelayo al frente del Ayuntamiento. Conviene apuntar en este sentido que Ruiz-Berdejo representa a formaciones como IU y Ganemos que han sido copartícipes de la gestión de Mamen Sánchez, por lo que tampoco podía cargar contra lo realizado en esta legislatura.
Algo más suelto de manos se vio a Manuel Méndez (Ciudadanos), hasta el punto de que a la hora de fijar preferencias de cara a posteriores acuerdos de gobierno se mostró abierto a cualquier posibilidad, recordando en este sentido que la formación naranja dejará libertad de decisión a las agrupaciones locales a la hora de decidir en este sentido.
Carlos Fernández (Adelante Andalucía) fue crítico con PSOE y PP, casi a partes iguales, pero admitió que llegado el caso favorecería la investidura de Mamen Sánchez, aunque no entraría en un Gobierno con el PSOE porque entiende que no es un partido “de fiar”.
Santiago Casal (Andalucía por sí) supo rentabilizar su presencia en el debate, visualizando a la suya como una opción dispuesta a pactar con cualquier partido y sin vetos de ningún tipo. En su última intervención se refirió al legado que el andalucismo (entonces encarnado en la figura de Pedro Pacheco) dejó en Jerez, atribuyéndose la “transformación” que la convirtió en una “ciudad vanguardista”.
A Manolo Guerrero (Podemos) se le vio excesivamente anclado en los papeles, pero al menos puso cara a unas siglas que por primera vez se presentan en solitario en unas elecciones municipales y que libran una dura batalla entre las formaciones políticas de izquierdas por alcanzar representación. El gran ausente del debate fue el candidato de Vox, Antonio Fernández, que declinó la invitación cursada por 7 TV Jerez.
Esa ausencia permitió que García-Pelayo no se viera en la tesitura de hablar sobre posibles alianzas con esta formación política. “Es que ni están ni se les espera”, dijo la candidata del PP cuando se le preguntó expresamente por un hipotético pacto de gobierno con este partido.
Por lo demás, fue un debate que podría considerarse de tono amable, con contadas interrupciones entre unos y otros candidatos. No hubo grandes frases ni anuncios sorprendentes que pudieran calar en el electorado.
Curiosamente apenas se abordó la situación económica y financiera del Ayuntamiento a pesar de la abultada deuda que acumula. Sí se cuestionó la calidad de los servicios públicos municipales, que incluso Mamen Sánchez consideró “mejorables” después de ocho años al frente del Ejecutivo local.
En este sentido, la práctica totalidad de las formaciones políticas incidió en la necesidad de mejorar la limpieza y el transporte público.
‘El minuto de oro’ final
Después de tres bloques, en los que se abordaron cuestiones tales como el modelo de ciudad que defiende cada partido político, los servicios municipales o la movilidad, los candidatos tuvieron ocasión de dirigirse a los espectadores para pedirles el voto. Mamen Sánchez (PSOE) contrapuso su modelo con el anterior de García-Pelayo, advirtiendo de que el domingo se trata de elegir “entre el futuro y el pasado”. “Tenemos una oportunidad única de votar basándonos en hechos y realidades”, dijo, “Quiero una confianza mayoritaria porque no me conformo, porque sigo creyendo en Jerez, porque Jerez está imparable y no la podemos parar”.
María José García-Pelayo (PP) también trazó una estrategia clara. “Pido el voto no solo a los que tradicionalmente nos habéis votado, sino también a los que estáis hartos de sanchismo”, subrayó. Además, aseguró que su proyecto “viene de la mano del Gobierno de la Junta” y tratará de “agarrarse al Gobierno de España gobierne quien gobierne”, añadió, para posteriormente añadir que si no llega a la Alcaldía la otra opción será un “batiburrillo” de partidos.
Manuel Méndez (Cs), cree que “el cambio es necesario” y en su caso llegaría de la mano “de un equipo nuevo, con personas con experiencia que vienen a la política para trabajar”. “Te pedimos el voto para que Jerez tenga lo que se merece, más inversión y más oportunidades”.
Raúl Ruiz-Berdejo (La Confluencia) es de la opinión de que la alianza de IU y Ganemos “es el único voto útil que garantiza un verdadero gobierno de izquierdas capaz de arremangarse y construir un futuro de prosperidad y esperanza. Somos la izquierda seria, no la que vende humo y tira de ocurrencias, porque lo hemos demostrado en la oposición”, apostilló.
Carlos Fernández (Adelante Andalucía) admitió no ser “un político profesional” y consideró “más que necesario” que en la Corporación municipal haya “una voz andalucista y de izquierdas que ponga en el centro los derechos y huya de la política profesional”. “Las personas que llevan años en la política están incapacitadas para gobernar. No nos merecemos tanto maltrato de los gobiernos de PP y PSOE”, concluyó.
Santiago Casal (AxSí), profundizó en esta idea recordando que tanto García-Pelayo como Sánchez “son profesionales de la política” a las que “no les importa Jerez” sino conservar “su sueldo”. “Que no te engañen con promesas que no van a cumplir”, apostilló.
Finalmente, Manolo Guerrero (Podemos) se comprometió a “pelear” por favorecer el acceso a la vivienda, “abaratar la cesta de la compra”, ofrecer un servicio municipal de dentista y psicólogo o hacer de Jerez “una ciudad más habitable”.
El debate no dejó ni vencedores ni vencidos. Solo la sensación de que queda todavía mucho partido por jugar y que este próximo domingo puede ocurrir cualquier cosa.
Mamen defiende su capacidad para llegar a acuerdos
Por lo que respecta a pactos de gobierno, Mamen Sánchez tiene claro que el futuro va a depender de lo que decidan los ciudadanos. En este caso, pone como ejemplo lo ocurrido en estos últimos ocho años, en los que ha precisado de alianzas con otras fuerzas políticas.
“Que no entrase otros partidos en nuestros gobiernos no fue responsabilidad nuestra”, recordó, advirtiendo a sus posibles socios de que “hay que asumir responsabilidades de gobierno”. Sánchez no ocultó que “incluso con Ciudadanos” ha cerrado acuerdos de gobierno.
Pelayo teme que estemos ante “un culebrón de Netflix”
María José García-Pelayo entiende que tras las elecciones quedará “una mayoría amplia del PP o cinco partidos gobernando Jerez”, algo así como “un culebrón de Netflix”.
Ahora bien, Casal (AxSí) no puso “veto” a ninguna formación política, porque “todas las fuerzas que se presentan están legalizadas”.
Adelante no va a propiciar un gobierno de derechas pero tiene claro que no entraría en un ejecutivo del PSOE y La Confluencia no facilitaría un gobierno de derechas “ni por acción ni por omisión”.
