El candidato de Adelante Andalucía en Jerez, Carlos Fernández, ha exigido a la alcaldesa de Jerez, Mamen Sánchez, que “deje de regalar suelo público de nuestra ciudad al sector privado”, después del anuncio de la cesión de una parcela de equipamiento público de propiedad municipal, situada entre la calle Pizarro y la avenida de Los Marianistas, que irá destinada a la construcción de una residencia para personas mayores con 120 plazas. “El Gobierno del PSOE de Mamen Sánchez, se parece al auténtico PP y a García Pelayo, por las políticas neoliberales que lleva a cabo diario”.
“Desde Adelante Andalucía vemos cómo la alcaldesa, Mamen Sánchez, en otra operación contra el patrimonio de los vecinos y las vecinas de Jerez, regala el suelo público a empresas privadas para el beneficio de estas, sin nada a cambio para las arcas municipales”, ha lamentado Fernández, que ha insistido en que “a esta cesión, se suma la del antiguo Museo Taurino al Obispado o el regalo de 65.000 metros de suelo público a promotoras inmobiliarias por un valor aproximado de 20 millones de euros, sin que las paupérrimas arcas públicas obtengan ningún ingreso que palien la situación de deuda de uno de los tres municipios más endeudados del Estado español”.
Para Fernández, con esta nueva operación, “se vuelve a perder otra vez una oportunidad para apostar por políticas de inversiones públicas que den servicios de cuidados de calidad, que es lo que verdaderamente necesitan nuestros mayores”. “Ya pudimos comprobar en la pandemia de la COVID19, el trato realizado en diferentes residencias de grupos privados, que escasean en medios y personal por el mayor beneficio empresarial”.
Por todo ello, “desde Adelante Andalucía, apostamos por fórmulas como cesiones de suelo a mayores de forma comunitaria por comunidades autopromovidas y autogestionadas, como respuesta a una necesidad humana universal de apoyo y que, al tiempo, reporta retos y oportunidades con un entorno para vivir la etapa de adulto mayor con calidad de vida”. Así, “proponemos un modelo residencial formado por viviendas de uso privativo y zonas comunitarias que se diseñan como extensión de la vivienda, y que suponen un método de creación participativo, que permite adaptar cada comunidad a su contexto cultural particular y que responde a las necesidades cambiantes de las personas en su proceso de envejecer, y sin ánimo de lucro”, ha concluido.