"La sentencia del Juzgado Contencioso-Administrativo nº5 de Málaga se basa en un claro error material y como consecuencia de provoca un fallo de la Justicia.
Intencionadamente y en el trámite de conclusiones, el abogado representante de la Mercantil Torrehermosa Properties, S.L., Don Francisco Javier Galán Palmero manifestó, gratuitamente y sin prueba alguna, que las Ordenanzas del PGOU de Torremolinos no habían sido publicadas en el BOP.
Dicho argumento nunca fue planteado ni en la demanda, ni en la contestación, ni en la práctica de pruebas y por lo tanto no fue ortodoxo tenerlo en cuenta por cuanto en el trámite de conclusiones sólo cabe alegar sobre las pruebas practicadas y por ello nos fue tenido en cuenta por la parte representante del Ayuntamiento, aunque sí por el Magistrado bajo el argumento de "no haber sido rebatida de contrario" a pesar de haber resultado la prueba capital y determinante en la decisión del contencioso.
Las Ordenanzas del PGOU de 1996 sí fueron publicadas en el Boletín Oficial de la Provincia de Málaga nº 245 de fecha 24 de diciembre de 1996, páginas 60 a 104. En todo caso la Sentencia en cuestión tendría eficacia única y exclusivamente frente al concreto acto administrativo a que se refiere y a nada más.
La insidia y tendenciosidad de la información de El País radica en querer dar a entender que la sentencia es extensible a todo el PGOU, e incluso tiene la desfachatez de insinuar un paralelismo con el desastre urbanístico de Marbella; información que intencionadamente o no, causa inseguridad jurídica pues ya han sido numerosas las personas y promotores que con inquietud han llamado para interesarse por el asunto, algo que no solo causa daño a los intereses de Torremolinos sino también a los de la provincia de Málaga, haciendo un flaco favor a los intereses generales de nuestra provincia.
El celo que el Ayuntamiento de Torremolinos está poniendo en impedir el cambio de uso turístico a residencial, confirmado con la creación de la Ordenanza Hotelera, única en su género en España, radica en evitar la especulación urbanística que supone el que construcciones que gozaron de mucho mayor volumen edificatorio que en las zonas residenciales colindantes porque se destinaban a la ocupación turística, después lo ignoren y quieran convertirlo en viviendas, en detrimento y menoscabo de la industria turística que es de lo que vive y da prestigio aTorremolinos.
El motivo de que el Ayuntamiento acuda a dar esta información a través de la publicidad obedece a que se trata de un asunto de enorme importancia que debe ser explicado en todos sus detalles y a la experiencia contrastada que este Ayuntamiento tiene con el Diario El País, que desde su descarado sesgo político, nunca ha acogido nuestras rectificaciones a pesar de que las mismas han estado siempre amparadas por hechos incontestables".
