Schommer realizó esta afirmación en el transcurso de la conferencia de prensa en la que el Museo Bellas Artes de Bilbao ha presentado la primera gran retrospectiva que dedica en su historia al internacionalmente reconocido fotógrafo vitoriano, de quien exhibe más cien obras creadas en 55 años de carrera profesional.
La muestra está divida en tres apartados: Primera época, Paisajes y escenarios urbanos y Experimentación y puesta en escena, que recorren lo más importante de la obra de Schommer desde las primeras fotografías en su Vitoria natal en 1955 hasta la serie de Cascografías volumétricas, realizadas en 2008.
La exposición incluye también varios de sus célebres retratos a personalidades españolas e internacionales de la Cultura como los poetas Gabriel Celaya, Rafael Alberti o José Hierro, pintores como Salvador Dalí o Andy Warhol, arquitectos como Eduardo Chillida, intelectuales como José Luis Aranguren y artistas como Antonio El bailarín.
Durante la presentación de la muestra, Schommer aprovechó para definirse como “una persona que desea hacer una obra para los demás, para que los demás queden satisfechos con esa obra”.
“Fui pintor, medio arquitecto e hice películas y, al final, me di cuenta, gracias a Irving Penn (fotógrafo estadounidense de moda y retratos) de que yo tenía que ser fotógrafo”, relató Schommer, a quien museos como el Georges Pompidu, de París, o el Reina Sofía de Madrid, dedicaron exposiciones.
Schommer afirmó que en fotografía, ha dado “todo lo que creía que podía dar” y sobre el momento que vive el mundo del arte considera que “hay una especie de pequeña desorientación de por dónde van a ir las líneas de los nuevos trabajos artísticos”.