“Esta es nuestra posición, yo no quiero que la gente interprete (otra cosa) porque esto no es una renuncia, sino un movimiento similar al que se hizo para las elecciones generales (en noviembre pasado), cumpliendo así con lo que mi espíritu, mis sentimientos, dan hasta este momento”, subrayó Micheletti a la televisión local.
Agregó que él ha visto “unos movimientos un poco raros" en los últimos días, sobre los que no precisó detalles, por lo que ha decidido “dar una satisfacción más al pueblo hondureño”.
“Voy a tratar de bajar mi perfil, tratar de moverme un poco a un lado para que el nuevo Gobierno pueda hacer sus atenciones”, explicó el presidente de facto al Canal 5, en Tegucigalpa, acompañado de su esposa, Siomara Girón.
Micheletti recordó que primero había pensado quedarse en la Casa Presidencial hasta el 27 de enero, cuando se cumple el mandato del derrocado presidente, Manuel Zelaya, y asume Porfirio Lobo.
“Sin embargo, no lo vamos a hacer, vamos a ir a la iglesia esa mañana mientras estén poniéndole la banda presidencial al señor presidente electo”, dijo Micheletti.
Reiteró que quiere darle “tranquilidad a la nación” y acusó a Lobo de haber estado “haciendo algunas presiones” para que él se haga a un lado del poder.
“Lo vuelvo a decir igual, cualquier circunstancia que me obligue a regresar de inmediato a Casa Presidencial, lo voy a hacer”, subrayó Micheletti, quien también anunció que hoy celebrará el último Consejo de Ministros de su Gobierno, “para aprobar las actas que quedaron suspendidas”.
El gobernante de facto se retirará hoy de la Casa Presidencial al terminar el Consejo de Ministros.
“De esa forma concluimos de una forma seria, responsable, con lo que es el Gobierno, no voy a ningún acto público, a ninguna otra reunión, voy a tratar de evitar cualquier justificación que tenga este Gobierno (el de Lobo) o los internacionales para decir que yo soy objeto de una interrupción en los casos en que puedan suceder de aquí a esa fecha”, apostilló.
Micheletti asumió el poder el 28 de junio de 2009, tras el golpe de Estado que los militares le dieron ese mismo día a Zelaya, quien permanece refugiado en la Embajada de Brasil en Tegucigalpa desde el 21 de septiembre pasado.
Zelaya podría desplazarse el 27 de enero a la República Dominicana con un salvoconducto que le concederá Porfirio Lobo, quien anteayer miércoles, firmó en San Domingo un acuerdo en ese sentido con el gobernante del país caribeño, Leonel Fernández.
Micheletti también se retiró unos pocos días de la Casa Presidencial a finales de noviembre pasado, mientras se celebraban las elecciones que le dieron el triunfo a Lobo.