El Ayuntamiento de Sevilla, a través de la Delegación de Limpieza Pública y Educación y de la empresa municipal de la limpieza Lipasam, pone en marcha desde este miércoles el "mayor plan de renovación de contenedores" con 3.800 nuevas unidades y una inversión de 3,4 millones de euros. A esto se suma la contratación de 33 trabajadores para generar cinco equipos dedicados a labores de repaso y limpieza de los puntos de contenedores.
Esta renovación del parque de contenedores de la ciudad se enmarca en el 'Plan Ciudad de Lipasam' puesto en marcha desde la toma de posesión del alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz (PSOE), con el objetivo de reforzar y mejorar el servicio de la limpieza en la ciudad, según detalla el Consistorio en un comunicado.
El alcalde ha presentado esta nueva medida en la zona de Cerro-Amate, donde arranca este plan de renovación de contenedores con un total de 150 nuevas unidades en zonas como la calle Amor, Carlos Marx, Gavilanes o Puerto del Escudo. Junto al alcalde, han asistido a la presentación de este plan la delegada de Limpieza Pública y Educación, Marisa Gómez; el delegado del Distrito Cerro-Amate, Juan Manuel Flores; y el gerente de Lipasam, Lucrecio Fernández.
Durante la presentación, Muñoz ha recordado que "desde el pasado mes de enero se han puesto en marcha distintas medidas que se enmarcan en un plan ciudad puesto en marcha desde enero y que incluye un programa de refuerzo de la recogida de naranja, una línea específica de baldeo o una programación de actuaciones integrales en barrios de la ciudad que lo requerían, entre otras cuestiones".
"Ahora damos un paso más con una nueva línea de este programa de actuación: la mejora de los contenedores de la ciudad. Hemos detectado en el análisis que hemos realizado que uno de los problemas que teníamos en muchos barrios era el estado de los contenedores que, en algunos casos, contribuía a un uso incorrecto y, en otros, su mal uso provocaba problemas de suciedad y malos olores", ha explicado el alcalde.
Muñoz ha señalado que "el objetivo del gobierno de la ciudad es avanzar en un nuevo modelo de trabajo que está permitiendo actuaciones integrales en todos los Distritos orientadas a reforzar y mejorar la limpieza y la conservación de los espacios públicos, una tarea que no es solo de Lipasam, sino que también es una labor de todos y cada uno de los servicios públicos y, en último término, también de la ciudadanía".
El plan de mejora de los contenedores cuenta dos líneas distintas: renovación y limpieza. En primer lugar, se renuevan el 20% de todas las unidades que hay en la ciudad. En total, Sevilla cuenta 18.000 contenedores y se van a instalar 3.800 unidades nuevas. Los que se encuentran en estado de deterioro serán retirados y los que estén en mejores condiciones serán reparados y podrán ser reutilizados en otras ubicaciones.
Esta inversión se va a realizar durante entre 2022 y 2023 y arranca este año con un total de 1.800 nuevos contenedores nuevos de todos los tipos de recogida. Tras comenzar en Cerro-Amate, continuará en el resto de Distritos de la ciudad en coordinación con los mismos. A continuación, se llevará a cabo la implantación de 150 en Macarena; 300 en San Pablo- Santa Justa; y 100 en Pino Montano.
Estos nuevos contenedores cuentan, además, con un nuevo sistema de apertura accesible y adaptado a personas con movilidad reducida y también disponen de etiquetas con un código QR desde el que se pueda acceder a información para saber qué tipos de residuos se pueden depositar en ellos.
Respecto a su limpieza y mantenimiento, se ha procedido a la contratación de 33 trabajadores para generar cinco equipos con seis profesionales cada uno que se están destinando a realizar labores de repaso y limpieza de los puntos de contenedores, incluyendo la recogida de restos depositados de forma incorrecta o la limpieza de grafitis o pegatinas. Para ello, se usarán equipos especiales con agua a presión y el uso de detergentes desincrustantes.
Igualmente, el alcalde ha destacado que, "además de la mejora del parque de contenedores de la ciudad, esta medida va a permitir reforzar la apuesta de la ciudad por la recogida selectiva y específicamente por los biorresiduos". En estos momentos, Sevilla cuenta con 420 contenedores de recogida de residuos orgánicos. Con este plan, se va a pasar a tener 1.800, lo que supone multiplicar por cuatro la presencia de los contenedores marrones en la ciudad.
Asimismo, la recogida selectiva ha crecido un 60% en el periodo 2014-2021. Esto tiene un gran impacto sobre las emisiones y la lucha contra el cambio climático: solo en el último año se han evitado 20.331 toneladas de gases de efecto invernadero, lo que supone que se ha dejado de emitir a la atmósfera el equivalente a 29 kg de CO2 cada vez que un vecino de la ciudad separa sus residuos.